Rocío Jurado dejó sin significado esa famosa frase que dice que nadie es profeta en su tierra. Cuando se cumplen diez años de su muerte, su Chipiona natal mantiene vivo su recuerdo en cada esquina y se prepara para poder, por fin, anunciar la apertura del museo que "La más grande" soñó.

Más de cuatrocientos de sus vestidos, su piano de cola, su Mercedes, sus incontables premios y un sinfín de recuerdos cedidos por su hija Rocío Carrasco llevan cinco años en un almacén aguardando la apertura de este museo, en una nave a las afueras de Chipiona que está reformada y lista para albergar este espacio también desde 2011.

"El retraso no es achacable a la familia ni al Ayuntamiento", explica Javier Díaz Jurado, concejal del Turismo de Chipiona. El escollo era la firma de un convenio entre la familia de Rocío Jurado y el Ayuntamiento para regular la gestión de la puesta en marcha del espacio, un museo que fue "un sueño" que la misma artista expresó en vida. Por fin este convenio parece que está listo para llegar a buen puerto. "Estamos revisándolo para incluir algunas matizaciones y llevarlo al Pleno municipal para que sea ratificado por el resto de los grupos políticos y proceder a la firma, ya de un día para otro", explica el concejal. Al gobierno municipal, que encabeza Antonio Peña (PP), le hubiera gustado poder abrirlo ahora, cuando mañana se cumple diez años de la muerte de Jurado, pero, después de cinco de espera, se conforman con ser "optimistas" y contar con la posibilidades de que pueda abrir sus puertas dentro de este emblemático año.