Torazo acumula títulos. Es "Pueblo Ejemplar" (2008) y "Pueblo más bonito de España" (2016). Quien quiera comprobar por qué tanta distinción puede hacerlo este fin de semana, la mejor ocasión para disfrutar de este núcleo de Cabranes que apenas supera los 200 vecinos pero que a lo largo de todo el año tiene una gran actividad festiva. Mañana lo que toca es el Festival de la Boroña de forna, un pan contundente a base de harina de maíz y un poco de trigo, relleno de chorizo, panceta y jamón.
Es un bocado fuerte, pero por su sabor merece la pena saltarse la dieta, aunque sea para probar un trozo de estos ricos panes que hoy mismo ya se hornean en casa de unas cuantas familias de Torazo. Mañana la actividad comienza en torno a las once de la mañana, cuando se abrirá el mercado. Luego será el pregón y posteriormente llegará la comida. El menú: ración de boroña preñada con jamón, chorizo y panceta, o parrillada. El postre, como no podía ser de otra manera en Cabranes, será a base de arroz con leche. Con la bebida, sale todo por 18 euros y es necesario comprar antes los vales.
A lo largo de la jornada hay tiempo de sobra para darse un paseo por Torazo y disfrutar de sus casas típicas asturianas, muy cuidadas por los vecinos y pintadas de llamativos colores, y sus muchos hórreos. Eso sí, mejor madrugar para encontrar buen aparcamiento y evitar problemas, mayores en caso de hacer buen tiempo. Desde Torazo, a la tarde, las opciones para completar la jornada son muchas: Nava (Museo de la Sidra), Villaviciosa y su costa (Tazones, Rodiles), Bimenes o el mismo Cabranes, con una parada en la capital, Santa Eulalia.
El fin de semana llega bastante animado en Asturias, donde la cercanía del verano es sinónimo de romerías. Todavía colean las del Corpus en algunos lugares (en Pravia se pueden ver hoy y mañana las alfombras florales, suspendidas días atrás por la lluvia) y ya se avanza San Juan, con pequeñas fiestas en algunos pueblos.
En Vegadeo están dedicados hasta mañana a su querida Silvallana, como llaman a la feria de muestras, y en Valdesoto (Siero) viajan en el tiempo para recrear en la Casona de Leceñes (el complejo cumple 300 años) la Asturias rural de hace un siglo (todo el día, hoy y mañana). Si el tiempo aguanta (más bien la previsión es de inestabilidad), quizás los más playeros quieran mar. En La Espasa (Caravia) cruzan los dedos para que haya viento y poder celebrar el Festival de Cometas, todo un espectáculo de color y destreza en este bonito arenal del Oriente.
No hay que olvidar, además, Grullos (Candamo), donde mañana se pueden comprar y comer las primeras fresas de la temporada en Asturias. La fruta candamina goza de gran fama. A 6 euros el kilo.
