El Ballet Nacional de España, que el mes pasado actuó en China, obtuvo un éxito rotundo en su actuación de ayer en el teatro Campoamor. La técnica, difícil de superar, se vio acompañada de un impresionante vestuario, con colores que diferenciaban claramente a los bailarines principales, de rosa claro, de los del resto de la compañía. La coreografía, como lo esperado, brillante.

El público llenó el teatro y no escatimó aplausos a los bailarines, que fueron saliendo por grupos al escenario. Comenzaron con "Farruca", con una excelente coreografía de Quintero; siguieron con "Viva Navarra". La bailarina interpretó una danza tan sutil y delicada como llena de brío y energía. El publicó lo agradeció.

La coreógrafa y anteriormente directora del Ballet Nacional de España, Victoria Eugenia, creó este solo inspirada en la coreografía para pareja de Antonio Ruiz Soler, que ella bailó con Antonio de Ronda durante sus años en la compañía del gran artista de la danza española. Ya es un clásico de la escena.

Después siguió el repertorio con "Ritmos" y "Suite Sevilla", en la que todos los músicos se emplearon a fondo, como los guitarristas Diego Losada, Enrique y Jonathan Bermúdez, y los cantaores María Mezcle y Sebastián Cruz. Thomas Potirón y Sergio Menem, violín y chelo invitados, estaban en su salsa, igual que el flautista Acosta.