El primer bebé en Europa con microcefalia y otras malformaciones asociadas al virus del zika vino ayer al mundo por cesárea en el Hospital Vall d'Hebrón de Barcelona. Su madre contrajo el virus al ser picada por un mosquito en un viaje a América Latina y no quiso abortar, aunque en mayo le detectaran las malformaciones en el feto a las veinte semanas de gestación. En Cataluña veintiuna gestantes han sufrido el virus de zika tras viajar a América, cinco de las cuales ya han dado a luz a bebés sanos, mientras que éste era el único caso en el que se detectaron las malformaciones en el feto.

El número de casos de zika confirmados en España asciende a 190, notificados a través de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, de los que 26 son mujeres que estaban embarazadas en el momento de la toma de muestras para ser analizadas. Cataluña es la comunidad con más pacientes (63), seguida de Madrid (52), Aragón (14), Castilla y León (11), Galicia, Comunidad Valenciana y Andalucía (7 en cada una), La Rioja (6), Navarra y Baleares (5 en cada una), Canarias y País Vasco (4), Asturias y Murcia (2 en cada una) y Castilla-La Mancha (1), informa la agencia "Efe".

La jefa de obstetricia y ginecología del hospital, Elena Carreras, destacó que los padres del bebé están "muy emocionados y contentos" con el nacimiento de su bebé y que la madre se encuentra en buen estado.

El parto se produjo "a término", al final de los nueve meses de gestación, "tal y como quería la madre", y los médicos no dieron más información sobre el bebé y su madre, incluso ni si es niña o niño o el peso al nacer, por respeto a la intimidad y confidencialidad de los datos médicos.

El jefe de neonatología, Félix Castillo, dijo que el bebé no ha precisado una reanimación específica pese a haber nacido "con un perímetro craneal bajo", es decir, con microcefalia, que le causará afectaciones neurológicas, cuyo grado ahora tendrán que determinar los médicos.

"Su estado clínico es correcto, está controlado y monitorizado en el servicio de neonatología y se han confirmado las exploraciones del embarazo", que ya detectaron la microcefalia, señaló el neonatólogo, para quien el bebé tendrá una esperanza de vida "como cualquier niño con una afectación neuronal y su calidad de vida se hace difícil predecirla sin saber aún el grado de afectación cerebral que tendrá y las complicaciones que le surjan".

El especialista explicó que el perímetro craneal normal oscila entre los 33,5 y 34 centímetros, y que el neonato lo tiene "más bajo". Tampoco precisaron los médicos qué otras malformaciones padece el menor, que ahora está siendo sometido a estudios clínicos para averiguarlo. "La microcefalia -manifestó Castillo- es una traducción de un cerebro que no ha crecido, de modo que no funcionará bien y probablemente tendrá una vida muy dependiente de sus cuidadores y de los cuidados de la sanidad pública". En cualquier caso, matizó el neonatólogo, el bebé será atendido por un equipo de médicos multidisciplinar y por sus padres, "que tienen una relación perfecta y lo cuidarán como si fuera una perla".

El pasado 2 de enero se diagnosticaron los dos primeros casos de zika en España en dos mujeres sudamericanas residentes en Cataluña. El 4 de febrero se conoció el primer caso de una embarazada afectada y seis días después el Ministerio de Sanidad aprobó un protocolo contra el zika. Ese mismo mes, una de las embarazadas contagiadas dio a luz a un bebé sano en Santiago de Compostela. El 5 de mayo Cataluña detectó el primer caso de un feto con microcefalia. El 6 de junio, Sanidad confirmó un segundo caso de malformación cerebral de un feto. La mujer, residente en Latinoamérica y que viajó a España, solicitó la interrupción voluntaria de la gestación. El 16 de junio abortó en Galicia una mujer por las graves malformaciones cerebrales del feto. El 1 de julio se registró el primer contagio por vía sexual del zika en España, en una mujer madrileña. El 12 julio, una mujer de 29 años que residía de forma temporal en Alicante y había sido diagnosticada con el virus de zika dio a luz un bebé sano. El día 18, Sanidad contabilizó 182 casos de zika en España, todos importados menos uno autóctono de transmisión por vía sexual. De ellos, 24 son embarazadas.