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La temporada de la OSPA suena bien

La Sinfónica del Principado, que mañana ofrece un concierto de puertas abiertas, inicia en octubre un programa innovador y que apuesta por los jóvenes valores | El recital más esperado es el de Ray Chen, el mediático violinista taiwanés

La sección de cuerda de la Orquesta Sinfónica del Principado, en uno de sus conciertos. Miki López

La Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias celebrará mañana, viernes, a las 20 horas en el auditorio Príncipe Felipe de Oviedo un concierto extraordinario de puertas abiertas, del que ya no quedan invitaciones disponibles desde el pasado lunes. El programa de este concierto de la formación asturiana, dirigida por su titular, el maestro Rossen Milanov, consta de fragmentos de obras muy conocidas por los aficionados de las salas de conciertos. Serán piezas que además también estarán presentes en los conciertos de una temporada que se prevé realmente interesante, que apuesta por la innovación y por los jóvenes valores, sin descuidar los títulos de repertorio y los solistas consolidados.

La obertura de "Oberon", de Weber; la polonesa de "Eugene Oneguin", de Tchaikovsky; el cuarto movimiento de la "Sinfonía n.º 4 (Italiana)", de Mendelssohn, y el preludio de "La Revoltosa", de Chapí, son sólo algunos de los títulos que tienen cabida en el concierto de mañana, de estética muy heterogénea. Con esta iniciativa de puertas abiertas la OSPA trata de llegar a un sector más amplio de la población, hacerse más accesible y realizar una importante contribución social. Un objetivo que están cumpliendo con éxito, a juzgar por la buena acogida que ha tenido esta convocatoria.

Para esta temporada, la OSPA ha decidido apostar por una programación que incluya varias obras de compositores contemporáneos, como Marcos Fernández (Barcelona, 1984), Mason Bates (1977) y Consuelo Díez Fernández (1958). Asimismo tienen en ella cabida jóvenes valores cuya proyección internacional es prometedora, que se alternan con solistas que ya cuentan con una carrera consolidada, como es el caso de Ray Chen, Leticia Moreno, Ning Feng y Daniel Müller-Schott. También entre los directores invitados destacan personalidades muy queridas por el público, como Víctor Pablo Pérez, Pablo González y Ari Rasilainen.

La temporada de abono propiamente dicha de la OSPA comenzará el 13 de octubre en el teatro Jovellanos de Gijón y el 14 en el auditorio de Oviedo, como viene siendo habitual desde temporadas atrás. Se inicia con un programa titulado "Rusia esencial I", en el que se interpretará una obra para orquesta sinfónica titulada "Pasión cautiva", de la compositora madrileña Consuelo Díez Fernández. El resto del programa estará íntegramente dedicado a Tchaikovsky, con el "Concierto n.º 1 para piano en si bemol menor, op. 23", en el que la solista invitada será la joven pianista ruso-americana Natasha Paremsky, alguien habitual en los auditorios norteamericanos, ganadora de numerosos concursos internacionales, a quien comparan incluso con Martha Argerich. Por último, la "Sinfonía n.º 6 (Patética) op. 74" cerrará el programa de estos conciertos, dirigidos nuevamente por Rossen Milanov, y servirá a la OSPA para mostrar su lado más dramático y emotivo.

La siguiente cita está prevista para noviembre, el día 25 en el Auditorio, después de las funciones de ópera que la orquesta realizará de "Cossì fan tutte". Este segundo programa, llamado "Relatos I", se presenta especialmente interesante y cuenta con el estreno absoluto de "Eclipse", una obra firmada por el compositor Marcos Fernández, que consolida su relación con la orquesta, con la que ha colaborado anteriormente. Asimismo, una de las grandes apuestas de la jornada será el "Concierto n.º 4 en sol menor op. 40" de Sergey Rachmaninov, no demasiado habitual en las programaciones, que suelen preferir su segundo concierto en do menor op. 18. Hachen Zang (Shanghai, 1990), ganador del concurso "Van Cliburn International Piano Competition" en 2009 y reconocido internacionalmente por su técnica impecable, será el pianista invitado que lo interprete. La suite orquestal de "El burgués gentilhombre", compuesta por Richard Strauss, será la obra con la que concluirá este concierto, a las órdenes del maestro Milanov.

Uno de los conciertos más especiales será sin duda el que protagonizará Leticia Moreno. Tras el éxito que obtuvo la violinista en 2015, en su primera actuación con la OSPA, regresará de nuevo el 1 y 2 de diciembre para interpretar el "Concierto n.º 5" de Mozart, una obra perfecta para demostrar la técnica que la crítica siempre le ha reconocido a esta violinista madrileña. La obra más singular de este concierto, que se completará con la "Sinfonía n.º 7" de Dvorak, es "The rise of exotic computing", escrita para orquesta y ordenador portátil por Mason Bates. Este compositor estadounidense, que además es DJ de música electrónica, es reconocido en todo el mundo por sus innovaciones en materia de orquestación.

El primer concierto de abono del año 2017 estará íntegramente dedicado a Beethoven. La OSPA interpretará los días 19 y 20 de enero en el teatro Jovellanos y en el Auditorio de Oviedo, respectivamente, la obertura "Coriolano" op. 62, el "Concierto para piano n.º 3 en do menor op. 37", con la interpretación de Leon McCawley, todo un especialista en el compositor de Bonn. Junto a él estará Manuel López Gómez, el director venezolano invitado para este programa, que ha sido asistente de Gustavo Dudamel en la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles.

Los días 26 y 27 de enero contarán una vez más con la presencia del director finés Ari Rasilainen, quien interpretó junto a la OSPA en 2015 un programa para el recuerdo, con una magnífica "Sinfonía n.º 5 op. 64" de Tchaikovsky. El otro protagonista de la jornada será el afamado violinista Jesús Reina, que, rehuyendo el canon, interpretará el concierto para violín de Joaquín Torres. Reina es especialista en música española y ha contribuido a su conocimiento a través de sus grabaciones, como de la obra completa para violín y orquesta de Jesús de Monasterio (1836-1903) que realizó con tan sólo 18 años.

El programa que dirigirá Pablo González, uno de los directores más queridos por el público asturiano, los días 16 y 17 de marzo será muy ambicioso y contará con obras muy exigentes para la plantilla orquestal. Comenzará el concierto con el poema sinfónico "Don Quijote" op. 35 para violoncelo, de Richard Strauss. En esta ocasión, el solista será Maximilian von Pfeil, actualmente principal de la sección de violoncelos en la OSPA. A esta obra le siguen el primer movimiento de la "Sinfonía n.º 10" de Gustav Malher, y para concluir otro poema de Strauss, "Muerte y transfiguración".

El maestro Rossen Milanov regresará nuevamente los días 23 y 24 de marzo con un programa especialmente centrado en la música del siglo XX. El programa recoge obras muy interesantes y evocadoras, como la suite op. 19 "El mandarín maravilloso", de Bela Bartok, y la "Metamorfosis sinfónica sobre temas de Carl Maria von Weber", de Paul Hindemith. Junto a estas obras, aparece el concierto para viola de Jennifer Higdon, toda una rareza que se estrenará en España por primera vez tras su estreno mundial en Washington en 2015. El intérprete en esta ocasión es el violista chileno Roberto Díaz, que ya ha visitado la OSPA en otras ocasiones.

Quizás el concierto más esperado por el público sea el de Ray Chen, el mediático violinista taiwanés cuya técnica es impecable y que revoluciona las redes sociales compartiendo consejos para tocar el violín y su actividad concertística. El 4 y 5 de mayo estará en Asturias para interpretar el "Concierto para violín en mi menor op. 64" de Mendelssohn. Junto a el, Víctor Pablo Pérez, alguien muy habitual y querido en la OSPA, que ha elegido dos obras tan dispares como la "Sinfonía n.º 4 en re menor op. 120" de Schumann y la "Sinfonía n.º 9 en mi bemol mayor" de Ramón Garay (1761-1823), compositor avilesino especialmente conocido por su música religiosa, pero que cuenta en su catálogo con una importante producción sinfónica.

El último concierto de la temporada de abono será un alarde de virtuosismo, protagonizado por Ning Feng, que ha incluido en el programa obras de Vieuxtemps, concretamente el "Concierto para violín n.º 4 en re menor op. 31", y de Paganini, su concierto número 1. Este concierto de clausura se completará con la obertura "Zaïs" de Rameau y las "Fiestas romanas" de Respighi, y se desarrollará nuevamente bajo la dirección de su titular, Rossen Milanov.

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