Oviedo, Andrea G. TORRES.

Paola Gardina y Alek Shrader darán vida a Dorabella y Ferrando en la ópera de Mozart "Così fan tutte", que se podrá ver en el teatro Campoamor desde el 13 de noviembre. Ambos debutan en la temporada ovetense con esta nueva producción que propone la Ópera de Oviedo, inspirada en un cabaret, y que pretende acercar el libreto de Lorenzo Da Ponte a la realidad actual en las relaciones de pareja.

La mezzo Paola Gardina, toda una experta del repertorio mozartiano, ha interpretado el papel de Dorabella en innumerables ocasiones por todo el mundo. Participó también en la sonada producción que Michael Haneke puso en escena en el Teatro Real en el año 2013, bajo el mandato de Gerard Mortier: "Me siento cómoda con el personaje de Dorabella; incluso he perdido la cuenta de las veces que lo he interpretado, pero aquí en Oviedo será distinto porque habrá algunas sorpresas que no puedo revelar. Tendréis que venir a ver la ópera".

Por su parte, Alek Shrader será el prometido de Dorabella (Paola Gardina) al inicio de la ópera, hasta que se construye la trama y las parejas se intercambian para probar si efectivamente Fiordiligi y Dorabella serán fieles a sus futuros esposos. El personaje de Shrader, Ferrando "es un soldado que vive enamorado de Dorabella; es un entusiasta en las cuestiones amorosas, mientras Dorabella es todo lo contrario, por ello quizá Ferrando haría mejor pareja quizá con Fiordiligi porque entiende mejor el concepto de fidelidad".

Gardina define a su personaje como "una joven noble que ha recibido siempre una educación muy estricta, y en esta situación decide jugar a un juego que infringe todas las normas que la sociedad le ha impuesto, simplemente por el hecho de experimentar que se siente al dilapidar los condicionamientos sociales. Es algo nuevo para ella que nunca se había comportado de ese modo. Personalmente creo que jugar así con los sentimientos es una cosa realmente arriesgada que no depara nada nuevo, en la ópera puede ser divertido, pero en el mundo real si juegas con fuego te quemas. En 'Così fan tutte' queda demostrado que ninguno de los protagonistas sabe realmente lo que siente".

"Al final de esta ópera todos los personajes sufren porque aunque no lo parezca, el tema no es muy divertido, invita a reflexionar cuando uno se va a casa después de verla. Sin embargo, a favor de esta producción debo decir que es la más divertida de todas en las que he participado", señala Shrader. Coincide con esta afirmación Gardina, quien comenta que los ensayos "son realmente divertidos, y hay mucha complicidad entre todos los cantantes. A diferencia de otros títulos, que se centran más en los papeles solistas, esta es una ópera que exige un gran trabajo en equipo porque los números de conjunto son fundamentales aquí".

Ambos cantantes aseguran que la ópera está llena de momentos divertidos por la propia naturaleza de los personajes. Gardina asegura que "Don Alfonso, que en esta producción será el dueño del cabaret en el que se desarrolla toda la trama, es quien más se divierte con todo lo que sucede a su alrededor".

Para Shrader es "especialmente simpático el momento en que Ferrando se despide de Dorabella, y ella que está algo enfadada, le coge para que no se vaya".

"Tanto Fiordiligi como Dorabella son dos mujeres jóvenes que deciden divertirse por su propia voluntad. Debe quedar muy claro el mensaje de que en ningún momento son engañadas. Cuando deciden intercambiar las parejas, ninguno de estos jóvenes sabe quien de todos ellos será feliz al final", explica Gardina.

En el terreno estrictamente musical ambos están de acuerdo en que es extraordinario poder trabajar con un director como el maestro Corrado Rovaris, que tiene tan interiorizado el estilo de la obra y que es tan buen músico. Cuando Paola Gardina describe las partituras de Mozart, dice que "no son sencillas, y paradójicamente cuando uno empieza a estudiar canto en el conservatorio lo primero que prepara son las arias de Mozart como si fuera lo más sencillo del mundo, pero yo no estoy de acuerdo. Es más, los números de conjunto en este compositor son especialmente difíciles porque la escritura musical es muy clara, y la orquesta acompaña de una forma muy discreta, dejando todo el protagonismo a las cuatro voces".