La historia del lastrín Agustín de Pedrayes (1744-1815), uno de los padres del sistema métrico decimal, está embargada por la tragedia. Pese a la fama que alcanzó en vida en Europa, ni en España ni en sus patrias chicas, Asturias y Lastres, se reconoció su talla. Para agravar el problema, la práctica totalidad de su obra se perdió en sucesivos incendios, que devoraron los ensayos y tratados por los que este gigante de las matemáticas cobró fama. Sólo ahora, cumplidos ya los 200 años de su muerte, su figura recobra parte de su esplendor merced al estudio biográfico que le dedica José Manuel Álvarez, cuyo libro "Agustín de Pedrayes y los números de la Ilustración", editado por Laria, se presenta mañana, a partir de las 19.30 horas, en el salón de actos del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA). Un volumen que además recupera un ensayo semiolvidado en el que Pedrayes se enfrenta a uno de los grandes problemas de las matemáticas: la cuadratura del círculo.
El problema es simple: se trata de cómo trazar con regla y escuadra un cuadrado con la misma superficie que un círculo determinado. Un logro inalcanzable que provocaba desajustes en aspectos básicos como la navegación, y cuyas repercusiones apenas se mitigaron en 1854, cuando Friedrich Bernhard Riemann formuló su célebre integral, que aplica el cálculo diferencial para cuadrar curvas. Pero esta solución ya la había anticipado Pedrayes 77 años antes.
"Cuando él elabora este manuscrito, en 1777, el tema de las cuadraturas era algo de gran preocupación. Es algo clave para hacer mapas, trazar itinerarios, superficies, cálculos astronómicos? Tenía una gran aplicación práctica, sobre todo para cuestiones militares navales", explica Álvarez.
Mas la edición crítica de este tratado no es el único hallazgo del volumen de Álvarez. La biografía que traza de Pedrayes corrobora las estrechas relaciones del matemático de Lastres con laAcademia de Ciencias de París, donde se le consideraba un verdadero genio. "Le llamaban 'El sabio español', y no dudaron en hacerle miembro. De hecho, Carl Friedrich Gauss seguía su trabajo, incluso lo cita en unas cartas. Es probablemente el matemático más grande que ha dado España", sostiene Álvarez.
Pese a que la mayor parte de su producción científica se ha perdido, el legado de Pedrayes sigue vigente merced a su participación en un logro fundamental: el sistema métrico decimal, que un equipo internacional desarrolla en París entre 1798 y 1799. "La aportación de Pedrayes es fundamental porque además desarrolla el 'comparador', que era un aparato de precisión que permitía justificar las réplicas del metro para los distintos países", relata Álvarez.
Pese a la altura científica que alcanzó en vida, Pedrayes murió en el ostracismo, y prácticamente en la pobreza. Aún hoy, si un encuestador saliera por Oviedo y preguntase por Pedrayes, un elevadísimo porcentaje de la gente apenas atinaría a señalar la posición de la calle en su honor, sin poder decir nada más. El día que esta tierra reconozca a sus notables se habrá logrado, sin duda, la cuadratura del círculo.
