San Miguel de Arroes es una parroquia muy guapa del concejo de Villaviciosa, que está, curiosamente, muy cerca de Gijón y al tiempo de la villa que da nombre al concejo. Cuenta, además, con un entorno generoso en cuanto a paisaje, pues estando enclavado en el campo se encuentra, a su vez, cerca del mar. En esta localidad maliayesa hay un barín con mucha historia, sobre todo de buen comer, y que sigue llevando el nombre de quien fue su principal protagonista, Inés Villabona, artífice de la merecida fama de su cocina. Desde hace veintiún años está al frente del mismo su mejor continuadora, su sobrina Nieves Cifuentes Villabona, quien nos cuenta la historia de este local sencillo y lleno de encanto, que no ha perdido un ápice de su autenticidad.
"Ésta era la casa de mi abuela Enriqueta, fue como muchos establecimientos entonces casa, bar y tienda. Su fundación es de hace unos cien años. Era un barín precioso y lo llevó muchos años mi tía Inés, que cocinaba de maravilla, de hecho siempre se mantuvo su nombre. Cuando ella se jubiló vine yo para continuar al frente de los fogones. Antes hubo un intervalo en el que estuvo alquilado un par de veces", afirma Nieves, que, sin duda, ha heredado los saberes de su tía y cocina, también, con respeto a la tradición y con conocimiento de la materia.
Eso sí, de vez en cuando también le gusta incorporar algún plato a su carta, como es el caso, este año, del pote de nabos. "Lo probé en Morcín y me encantó. Ahora lo pongo aquí y parece que tiene éxito", dice ella con admirable humildad. Cuenta con un menú a 8 euros entre semana, en el que hay elaboraciones fijas en los primeros. Así, por ejemplo, el lunes toca arroz con pitu, el miércoles pote asturiano, el jueves patatas con pulpo y el viernes fabada, además de poder escoger también otro primero si no interesan los antes citados, y luego el segundo. Los sábados el menú, por ser especial y más diverso, es a 12 euros. Entre algunos de los platos que se pueden encontrar en este menú, y que van variando según los días, además de los primeros antes citados, también están los pimientos rellenos de carne, cabrito, cordero, carne rellena, solomillo al queso de afuega'l pitu o merluza a la cazuela.
La carta también tiene para todos los gustos. Así, además de algunas de las especialidades de Nieves, como son el rabo de toro, jabalí guisado, pulpo a la gallega o los cachopos de setas, se puede encontrar en su local picadillo de venado o jabalí, costillas al ajillo, croquetas, chorizos a la sidra, ensalada de la casa, chipirones a la plancha, cruceta ibérica, chuletinas de cordero o merluza a la romana. Por encargo, también elabora verdinas con marisco, fabas con almejas, arroz con llámpares, que también tiene mucha fama, y "lo que el cliente me pida, si lo se hacer, que lo hago encantada", señala ella sonriendo.
Casa Inés es pequeñín. Tiene capacidad para 32 personas entre el comedor y la zona del chigre. Llegado el buen tiempo es una gozada disfrutar del prao y merendero que tiene detrás de la casa, amplio y soleyero. Tiene algunas plazas de aparcamiento frente a este local, que cuenta, por su cercanía, con numerosa clientela de Gijón. El fin de semana se recomienda llamar y reservar en el 985894809. Cierra el martes.
