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Un Frankenstein protofeminista

Los asturianos Raquel Lagartos y Julio César Iglesias alumbran una novela gráfica que reinterpreta la obra y la vida de Mary Shelley, creadora del monstruo

Un Frankenstein protofeminista

En la noche del 16 de junio de 1816, el poeta inglés Lord Byron recibe a cuatro invitados en Villa Diodati, Suiza. Son Percy Shelley, su mujer Mary Shelley, Claire Clairmont, hermanastra de ésta, y John Polidori. Byron reta a cada invitado a que escriba una historia de miedo. Mary Shelley hace historia de la Literatura al responder a ese reto entre amigos con "Frankenstein o el Moderno Prometeo", obra inaugural de la ciencia ficción. Doscientos años después, los ovetenses Raquel Lagartos y Julio César Iglesias, ilustradora y guionista respectivamente, recuperan la figura de la autora que imaginó los delirios creadores de Victor Frankenstein. Acaban de publicar la novela gráfica "Mary Shelley: la muerte del monstruo" (Diábolo Ediciones).

La idea surgió principalmente de Raquel Lagartos, ilustradora y profesora de Matemáticas. Hace años leyó "Frankenstein". Sabía que había diferentes versiones de la criatura, pero aún así se sorprendió. Muchos tienen en la cabeza al personaje de "El doctor Frankenstein" (1931), dirigida por James Whale y protagonizada por Boris Karloff. En ella se muestra a un engendro torpe, bobo. Muy lejos del original.

"De repente, me encontré en el libro a una criatura muy rica, maravillosamente construida. Un personaje lleno de matices y de sentimientos que quería ser amado y al que la sociedad lo apartaba, lo ninguneaba y lo maltrataba sólo por el aspecto que tenía y por cómo era". Lagartos se percató de que el monstruo reflejaba parte de la personalidad Mary Wollstonecraft Godwin, que tomó el apellido que la haría inmortal de su esposo, el poeta Percy B. Shelley.

Lagartos explica que la escritora nunca tuvo una vida fácil. Nada más nacer, falleció su madre. Se escapó con un hombre que estaba casado. Su padre, a pesar de predicar el amor libre, la repudió por esto, como la sociedad. Se murieron tres de sus hijos. Incluso la culparon de la muerte de su marido. "Una serie de acontecimientos que hicieron que todos los convencionalismos de la época aplastaran a una mujer con un gran talento. Pero, al final, ella se volvió conservadora para lograr salir adelante. Se hundió a la creadora pero la mujer siguió", afirma Lagartos.

Julio César Iglesias también se sentía atraído por esta escritora inglesa. "Había leído 'Frankenstein' y, en general, la obra de Mary Shelley. Me interesaba mucho cómo había sido una de las protagonistas del nacimiento de un nuevo género, de un nuevo modo de concebir la literatura", dice. Para el guión leyó casi todos los diarios de los personajes que salen a lo largo del cómic, la correspondencia entre ellos y obras científicas que le sirvieron para contextualizar la época.

Apagada por la sociedad

"Lo que más me llamó la atención, y que en lo más profundo es el tema del cómic, es cómo Mary Shelley es un modelo casi de protofeminismo, pero que no se puede desarrollar. Ella fue una escritora magnífica en su primera obra. Después fue apagada por la sociedad. Progresivamente fue adoptando puntos de vista más conservadores que se alejaban de la ruptura radical que supone Frankenstein. Lo que más me interesó es que, pese a ello, lo interiorizó de tal manera que aunque renegó de sus primeras ideas, siempre intentó ser feliz. Esas dos dimensiones de su lucha, la pugna como escritora y como persona, me parecieron realmente interesantes", argumenta Iglesias.

Para las ilustraciones, Raquel Lagartos utilizó el blanco y negro y grises. En principio, consideró que el color no le aportaba dramatismo. "Pero teníamos que separar dos momentos: el presente de la historia y los flashbacks. Porque la historia la va contando una Mary Shelley anciana en sus últimos días de vida. Entonces se me ocurrió meter el color rojo. Es el color de la violencia, la sangre? pero también de los atardeceres. Me permitía jugar con los diferentes ambientes, pasar a cosas más evocadoras y a otras escenas más violentas. Me daba mucho juego", explica Lagartos. Mañana, sábado, presentarán la obra en la librería de FNAC, a las 19.00 horas, junto a la escritora y periodista Ángeles Caso, autora del prólogo.

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