"Destino 48" están aún con la resaca del subidón de haber tocado el pasado fin de semana en Gijón junto a Dani Martín. Toda esa energía la soltarán esta noche en Oviedo (La Salvaje, 22.00 horas), en la presentación en la capital de su nuevo disco "Sol de invierno". Jaime Arístegui, alma de la banda, charló ayer con los lectores de la edición digital de LA NUEVA ESPAÑA. Lo que sigue es un extracto de esa conversación.

-¿Qué tal la experiencia junto a Dani Martín?

-Fue una experiencia brutal, tanto a nivel musical como personal. Estuvimos muy cómodos con Dani. No es normal que se trate tan bien a un telonero. Tocar en un teatro lleno es un lujo.

-¿Os gustaría tener algún otro instrumento más en el grupo?

-Ahora mismo estamos muy cómodos con la formación que llevamos en directo: batería, bajo, guitarras, en La Salvaje nos acompañará además una sección de metales, aunque un buen Hammond B3 nunca sobra.

-Si mañana os concedieran a modo de deseo tocar en un sitio, ¿cuál sería?

-En la plaza de toros de Barcelona con Andrés Calamaro

-¿Qué significa "Destino 48" para la banda, algo mas que una cifra?

-El primer garaje en el que ensayábamos estaba en la calle "Camino del Destino nº48". Hay un disco de Quqiue González que se llama "Salitre 48", nos parecía un buen número.

-¿Dónde os veis de aquí a 5 años?

-No sabemos si nos habrá dado tiempo a ser estrellas mundiales o nos habremos peleado por el camino, pero seguro que seguimos locos por la música.