El tenor español Josep Carreras, de 70 años, que se encuentra en Australia como parte de su gira mundial de despedida, aseguró ayer que el futuro de la ópera se encuentra en buenas manos. "Sinceramente, las nuevas generaciones tienen una gran cantidad de artistas magníficos, grandes talentos, artistas de magnífica calidad". Por eso sopesa ya la idea de la jubilación: "Creo que en un par de años será un momento adecuado para que todavía, relativamente joven, me dedique a otras actividades y otras cosas que durante más de cincuenta años no he podido hacer".