Una mirada más intensa y extensa hacia el cine europeo, además de un planteamiento de respeto a la austeridad económica que se demanda desde la empresa municipal Divertia, son algunas de las líneas programáticas por las que una comisión de expertos propuso ayer al crítico y cineasta gijonés Alejandro Díaz Castaño (1979) para dirigir el Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX). Y lo hizo frente a los otros dos candidatos, Diego Mas y Nacho Carballo, que componían la terna seleccionada entre los catorce aspirantes que se presentaron al segundo concurso (el primero fue declarado desierto) para cubrir una plaza que permanece vacante desde el pasado 31 de diciembre.

Díaz Castaño ha sido, curiosamente, el programador de José Luis Cienfuegos, actual director del Festival de Cine Europeo de Sevilla y la persona a la que reemplazó Carballo hace cinco años por decisión del anterior concejal de Cultura, el forista Carlos Rubiera. Lo fue en Gijón y lo era ahora en Sevilla. La intención del presidente del consejo de administración de Divertia, el concejal Jesús Martínez Salvador, es que la persona propuesta por la comisión seleccionadora empiece cuanto antes a preparar la quincuagésima quinta edición del FICX, prevista para el próximo mes de noviembre.

Pero Díaz Castaño, con el que ayer no pudo hablar este diario pese a los reiterados intentos, está sólo propuesto, no oficialmente elegido. Tendrá que esperar hasta el próximo jueves. Entonces, salvo sorpresa, el consejo de administración de Divertia ratificará la decisión del grupo de expertos. Según las fuentes consultadas ayer por este periódico, tanto Foro como Xixón Sí Puede darán luz verde a un nombramiento que puede tener también el previsible apoyo de Ciudadanos. PSOE, PP e IU se han mantenido por distintas razones al margen del proceso de elección del nuevo director del FICX, que tendrá limitados los presupuestos de las dos próximas ediciones del certamen: un máximo de 900.000 euros. Un coste similar al del año pasado.

No era difícil ver ayer una cierta satisfacción en el equipo de gobierno por cómo han ido las cosas. Se han cumplido los plazos fijados. Y se evitó el desastre de la convocatoria del primer concurso, que fue declarado desierto después de que la exigencia certificada de un cierto nivele de inglés dejara a un solo aspirante, finalmente descartado.

Carballo, que ha dirigido el FICX en los últimos cinco años, ha competido en los dos concursos. Y ayer tuvo que ver cómo uno de los más estrechos colaboradores de Cienfuegos, a quien él sustituyó tras una decisión política que fue muy críticada desde diversos sectores relacionados con el cine, le ganaba la partida.

¿Y por qué Díaz Castaño y no Mas o el propio Carballo? "Parece el candidato idóneo y ha presentado un proyecto muy sólido para el festival", explicaron fuentes conocedoras del proceso de elección. "Es una persona que ofrece un doble perfil que se busca: el de director y el de programador; y alguien, además, que tiene capacidad para captar nuevos recursos y patrocinios", señaló otra fuente. Su propuesta se atiene estrictamente al presupuesto estipulado por Divertia.

Los sobrecostes han sido el principal motivo esgrimido desde la oposición municipal para cuestionar la gestión de Carballo. El gobierno de Foro, que no ha querido enfrentarse en este capítulo a Xixón Sí Puede, aceptó la vía del concurso para cubrir la plaza de la dirección del FICX. Una decisión que los socialistas, principal grupo de la oposición, rechazó.