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Oviedo se rinde al placer del Barroco

La "Accademia del Piacere" recupera la música del maestro Sebastián Durón y brilla en las piezas instrumentales

La soprano Nuria Rial interpreta una cantada. IRMA COLLÍN

El amor mundano y divino fue el protagonista de la jornada inaugural de la IV temporada del ciclo la Primavera Barroca que arrancó ayer en el Auditorio de Oviedo. La agrupación "Accademia del Piacere", que dirige Fahmi Alqhai y la soprano Nuria Rial dieron voz al maestro de la Real Capilla Sebastián Durón, uno de los autores cumbres del Barroco español, en un concierto que enamoró al nutrido público que se acercó al auditorio Príncipe Felipe de Oviedo.

El programa de este primer concierto se centraba en la temática amatoria a través de su obra escénica y sus cantadas. Bajo el título "Muera Cupido", los miembros de la "Accademia del Piacere" combinaron reconstrucciones de algunas de las obras de Durón en las que ha participado el propio Alqhai, como la sinfonía de la comedia "Muerte en Amor es la Ausencia", con otras piezas que se han instalado en el repertorio musical del Barroco español, como es el caso de la cantada al Santísimo "Ay que me abraso de amor en la llama". Un completo programa que la formación interpretó con los números entrelazados, como es norma en los conciertos de música barroca.

La soprano Nuria Rial acaparó la atención del público desde el primer momento. Su voz limpia, con un fraseo y una dicción envidiables, también supo atender en su interpretación a la retórica que toda esta música lleva implícita. La mezzosoprano demostró su calidad con una sonoridad notable, haciendo partícipe al público del intimismo con el que afronta la interpretación.

El virtuosismo, no obstante, se reveló especialmente en los números instrumentales, donde los músicos de la "Accademia del Piacere" brillaron con intensidad. Gustaron especialmente los "Canarios", que Fahmi Alqhai tocó como solista de la viola de gamba, así como la citada "Ay que me abraso de amor en la llama", que la formación interpretó haciendo énfasis en los contrastes del tempo y recreándose en las disonancias.

Un concierto, en suma, que conquistó al público que se acercó al auditorio ovetense, rendido al placer del Barroco y que demostró su agrado ante el desempeño de la formación que lidera Fahmi Alqhai. Un público que, a cada edición de la "Primavera Barroca", crece en número, conocimiento y entusiasmo.

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