Me contaba hace poco una chica el debate que habían tenido los profesores de infantil en el colegio de su hijo en torno a la posibilidad de mostrar durante un festival solidario la famosa y durísima foto de Aylan, el niño kurdo que apareció muerto en una playa de Turquía en 2015 y que dio la vuelta al mundo, provocando una conmoción que duró lo que dura un tuit, no nos engañemos, porque aquella imagen poco cambió la situación, la verdad. Aunque esta sociedad los trate como tal, nuestros hijos no son tontos a los que debamos meter en una burbuja, deberían saber y conocer las condiciones de vida de los niños de su edad, acercarse a una realidad que es muy lejana hasta que llega a nuestras costas y nos da en las mismas narices de una conciencia atrofiada. No es bueno que los niños del primer mundo desconozcan esa clase de situaciones, por eso nos gustan tanto libros como ¿Dónde viviré?, publicado por Editorial Juventud y que pretende eso precisamente, que los pequeños que nos rodean y que tienen juguetes, comida, tiempo para divertirse y un lugar donde dormir, sepan que muchísmos en todo el mundo, a causa de la multitud de conflictos armados activos, se han convertido en refugiados que desconocen su destino más inmediato. Su autora, Rosemary McCarney, es embajadora y representante permanente de las Naciones Unidas y la Conferencia de Desarme en Canadá, y conoce perfectamente la situación de los niños de Croacia, Iraq, Líbano, Ruanda y otros tantos sitios de los que habla en el libro, que está ilustrado con poderosas fotografías de la Biblioteca de imágenes de ACNUR. Además, parte de los beneficios obtenidos por la venta de ejemplares de este libro serán donados a programas para niños refugiados de todo el mundo, una razón más para no dudar a la hora de conseguir esta obra imprescindible para ampliar la visión de la realidad de nuestros hijos.
