El artista asturiano Armando Pedrosa cierra hoy en Madrid su exposición "Espacios al límite", una muestra en la que el pintor presenta las obras de los tres últimos años. Unos lienzos de gran formato en los que el pintor profundiza en sus reflexiones sobre la forma abstracta desde la representación de la geometría y el empleo del collage.

"Aunque se tiene la visión de que los collages son muy sencillos, en realidad llevan mucho tiempo porque están hechos de forma muy minuciosa, buscando relieves y sombras determinadas", explica Pedrosa, que trabaja con bocetos incluso en sus obras abstractas.

En total, el artista asturiano ha presentado en Madrid una veintena de obras, en su mayoría óleos sobre lienzo de gran formato, en una muestra que incluye también esos collages y esculturas de acero inoxidable. El título de la exposición, "Espacios al límite", no es sólo una etiqueta, ya que encierra una reflexión en sí mismo.

"Hablo de espacios al límite porque, si bien son abstractos, son espacios que desaparecen hacia los límites mismos del lienzo", explica el artista. La continuidad con su obra se percibe en las técnicas que emplea, pero también en la introducción de elementos geométricos.

"Mi última exposición monográfica es de hace ya algunos años, sobre 2012, aunque el año pasado participé en una colectiva en la galería Odalís de Madrid, y ahora estoy seleccionado para una muestra muy importante que se va a presentar en la Fundación Suñol, en Barcelona. Pero respecto a esas otras muestras, a esa producción previa, sí que se puede ver una continuidad. Quizás se perciba un cambio en los espacios de fondo de los cuadros, que suelen ser más amplios. En cuanto a los collages, algunos son planos, formando algo arquitectónico. Y otros tienen algún paralelepípedo, simulando la geometría. Pero todo desde ese concepto elemental, minimalista, que yo he tenido", sostiene el artista asturiano.

A estas alturas de su trayectoria, Armando Pedrosa poco tiene ya que demostrar. El Museo de Bellas Artes de Oviedo, el Museo Municipal de Madrid, o pinacotecas estadounidenses como los museos de arte moderno de Cleveland y Baltimore disfrutan de la obra de un artista que, en su juventud, conoció al mismísimo Andy Warhol. Superados ya los 75 años, el ovetense Armando Pedrosa mantiene la ductilidad y la frescura que han jalonado toda su producción.