Denis Villeneuve dirige la secuela "Blade Runner 2049", que transcurre treinta años después del filme original y muestra un mundo donde "las cosas han empeorado, los personajes están más aislados y el entorno es todavía más tóxico", según dijo su protagonista, Ryan Gosling. El equipo de la película, que se estrenará el próximo mes de octubre, ha visitado Barcelona para promocionar el largometraje ante los distribuidores europeos reunidos en el congreso Cine Europe, que se celebra esta semana.

Ryan Gosling explicó que el nuevo largometraje "continúa la narrativa" del filme original de Ridley Scott, que "dejaba muchas preguntas abiertas". Gosling da vida al oficial K, un nuevo "blade runner" del departamento de policía de Los Ángeles que inicia una investigación que le lleva a "hacerse muchas preguntas, algunas relacionadas con su propia identidad, tal como pasaba en la primera parte".

"Mi personaje se toma muy personalmente la investigación", añadió el actor, y en su búsqueda de la verdad se encuentra con Rick Deckard (Harrison Ford), antiguo "blade runner" que lleva desaparecido 30 años. El director, Denis Villeneuve, aclaró que es una película "negra y detectivesca" como la primera, en la que se siguen las evoluciones de un policía que inicia una investigación que le llevará a "soñar con un mundo mejor".

Si el filme de Ridley Scott ya era oscuro, la secuela promete serlo todavía más porque "las cosas han ido a peor en estos años" y la película muestra "un ecosistema que ha colapsado", según Villeneuve.