Los nuevos responsables del Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX) están convencidos de que al final del certamen, después de la entrega de galardones el próximo sábado y las últimas proyecciones programadas para el día siguiente, domingo, el certamen puede alcanzar datos de récord: más de 50.400 espectadores en sala.

Está por ver, claro, pero así lo indican las cuentas de los seis primeros días de celebración del festival. Hay optimismo. Las cifras apuntaban en la tarde de ayer a que se está cerca de superar los números del año pasado en el capítulo de asistencia a las proyecciones. En 2016, en la quincuagésima cuarta edición y última de las cinco que dirigió Nacho Carballo, hubo 45.410 espectadores de sala. Si se tiene en cuenta que aún quedan cuatro días de actividad, con alguna proyección también fuera de Gijón (en Oviedo, por ejemplo), no es aventurado adelantar que se pueden mejorar incluso las cifras de 2015.

La organización del FICX da por superado el reto de trasladar buena parte de la programación desde los Cines Centro a los Yelmo, en La Calzada. Una decisión que se fue demorando en los últimos años, pese a la situación de cierre de las instalaciones del San Agustín, por temor a una deserción del público. Los datos a los que tuvo acceso ayer este diario indican que, lejos de esa situación, los espectadores mantienen su fidelidad a la mayor cita cinematográfica del Principado.

Alejandro Díaz Castaño, director del FICX que se puso al frente del certamen el pasado abril después de superar el concurso para la adjudicación de la plaza, aseguraba el pasado 11 de octubre que con ese traslado desde los Centro a los Yelmo se evitaba el "terreno peligroso". Las lanzaderas de la Empresa Municipal de Transportes de Gijón han facilitado una operación que, según los responsables del FICX, está yendo mucho mejor de lo esperado. Las citadas salas de La Calzada acogen casi la mitad de las proyecciones del certamen.

El desembolso para sustanciar ese traslado está próximo a los 70.000 euros. El presupuesto total de la edición en marcha del FICX es de 850.000 euros. Los responsables de la cita están también satisfechos por el funcionamiento de las otras sedes: teatro Jovellanos (con largas colas), Centro Antiguo Instituto, Centro de Pumarín Gijón-Sur y Laboral (teatro y paraninfo).

El récord de asistencia global al festival se batió hace dos años, con 73.500 espectadores. En ese número se incluye la totalidad de las personas que han participado en alguna de las actividades del certamen: conciertos, exposiciones, presentaciones de libros, talleres, etcétera, junto con la de asistentes a las proyecciones en sala. La principal preocupación de los responsables del FICX era no perder demasiados espectadores por el cambio de sede. Todo indica que, al cierre de esta edición, el certamen gijonés seguirá entre los cinco grandes españoles, junto a San Sebastián, Sitges, Valladolid y Sevilla.