"Me inspiré en '1984', la novela de (George) Orwell, y también en 'La naranja mecánica', la película de (Stanley) Kubrick, sobre todo para dar con el estilo visual de mi obra". Clara y lacónica, la directora austriaca Ruth Mader habló ayer de su segunda película, "Life Guidance", una distopía en la que no falta el suspense y con la que compite en la sección oficial del Festival de Gijón.

La realizadora regresa al certamen, en el que estuvo hace catorce años con su primer filme, para poner el foco sobre una amenaza real: cómo las clases medias se han vuelto "transparentes" por el uso continuado y masivo de las nuevas tecnologías y las redes sociales: "Así se han hecho vulnerables y atacables en su intimidad".

"Life Guidance" es el nombre de una agencia que, en un futuro no demasiado lejano, se afana en la domesticación de seres aparentemente felices. En realidad es una denuncia sobre la alienación de las relaciones humanas en el turbocapitalismo que deja, en sus orillas, un ejército de perdedores. "Un retrato de la sociedad en estos momentos", dijo. "Narcisismo es estar dispuesto a entregar datos a todo el mundo", hizo resaltar la cineasta. Ese tráfico de informaciones personales a tan gran escala es un hecho inaudito en la historia de la humanidad. Curiosamente, en este filme -rodado en alemán y con guión al alimón de Ruth Mader y Martin Leindenfrost- no aparecen los ubicuos dispositivos electrónicos móviles que han colonizado nuestras vidas: "Es una decisión deliberada, debido a que toda esa tecnología se queda obsoleta en cinco años y mi intención era crear un espacio intemporal".

Ruth Mader contó que hizo "Life Guidance", protagonizada por Fritiz Karl, Katharina Lorenz y Florian Teichmester, después de renunciar al rodaje de una película sobre un internado de chicas católicas. "Después de 'Life Guidance' será más fácil conseguir financiación", señaló, después de indicar que se trata de un proyecto que exige coproducción de Austria, Alemania y Francia. ¿Cómo describe su segundo largomentraje? "Es una película de suspense, y aunque el público pueda creer que es ciencia-ficción, se alude a la realidad", afirmó.

El filme se cimenta sobre una atmósfera opresiva en la que los personajes parecen atrapados. "Empezamos a ensayar con los actores semanas antes y la ambientación estaba muy planificada", relató la directora. Ésta ha intentado, asimismo, ser fiel a una descripción de las estratificaciones sociales: oligarquia, clase media, trabajadores pobres... "He trabajado mucho el concepto de color, la luz, la presencia del cristal como referencia a la transparencia", añadió.

¿Qué opinión le merece el cine que se filma en Austria y en el resto de Europa? "En Austria se hacen buenas películas, pero en todo el cine en general hay una notable influencia de la televisión y sus series, cuyas producciones son dominantes". Y más: "El cine está retrocediendo en favor de la televisión, hay ya festivales que admiten y estrenan series telivisivas". Ruth Mader puso distancia con quienes casi exigen paridad entre humbres y mujeres en los certámenes cinematográficos. El de Gijón tiene notable presencia femenina: "No estoy a favor de los porcentajes, que me tocan los huevos; en mi pelícua las mujeres están por ser las mejores y no por ser mujeres".