Movistar+ estrena su nueva serie original "Vergüenza", una comedia "surrealista y bizarra" que acompaña en su vida cotidiana a una pareja de mediana edad que se mueve entre el disparate y lo incorrecto, en un derroche de humor negro que provoca sentimientos de "vergüenza ajena" al espectador.

Interpretada por el asturiano Javier Gutiérrez y Malena Alterio, la serie gira en torno a Jesús, "una especie de rey del cuñadismo, con todos los vicios y todos los defectos que nos avergüenzan y nos espantan pero que, a la vez, nos atraen", le define Gutiérrez, y Nuria, una mujer "dulce y aparentemente, cándida, pero que sabe muy bien lo que quiere", añade Alterio.

Ambos actores hablan con Efe de esta serie, dirigida por Juan Cabestany y Álvaro Fernández-Armeno, que estrena sus diez primeros episodios y ya prepara el rodaje de otros siete, ha confirmado Alterio.

La actriz argentino-española opina que "lo interesante de la serie es que cualquiera se puede ver identificado en algún momento, porque ¿quién no ha metido la pata alguna vez? ¿quién no ha engordado un currículo? ¿quién no ha dicho lo inapropiado en el peor momento?".

Lo cierto es que Jesús no es que "alguna vez" meta la pata; es que lo lleva en el ADN, considera Gutiérrez, para quien "lo interesante de este personaje es que lo que hace tiene que ver con nuestros genes, con esta 'cosa' de ser 'español'".

"Pero esto no se queda en mero chiste", añade, porque dentro también hay críticas más profundas: desde las dificultades para sobrevivir de la pareja, que son "mileuristas" -hoy, casi un lujo, añade Alterio-, a sus intentos por crear una familia.

En ese sentido, Gutiérrez opina que "es una radiografía de la sociedad actual, de la gente de mediana edad de este país que lo está pasando mal, a quienes les han contado que hemos salido de la crisis y en realidad están dentro de una gran estafa, hay un drama debajo de las risas".

Su personaje, Jesús, es un fotógrafo "BBC" (Bodas, Banquetes y Comuniones) que cree que es un artista; en realidad es "un cuñao, un insoportable y un metepatas", le define Alterio, que reconoce las ganas de que su personaje "abofetee al marido o salga corriendo".

A Gutiérrez le pasó algo muy diferente: se "salió" totalmente del personaje: "Me alejé de él porque es un tipo al que repudio, me repele, pero es cierto que me divierte mucho ver cómo se enfrenta a sus cosas, es muy osado en su ignorancia y no da marcha atrás en ningún momento".

"Es de las pocas veces que no me reconozco" en un papel, se ríe el ganador del Goya por "La isla mínima", actualmente protagonista de otra serie en emisión en TVE, "Estoy vivo".

"Lo que tenía claro era que no podía reírme del personaje, había que tomarle en serio, y de hecho hay un drama debajo, tienen dificultades para llegar a fin de mes, no tienen amigos... es una pareja muy triste, por eso se solidariza el espectador con ellos", considera el actor.

Junto a los protagonistas, Miguel Ángel Rellán, en el papel del padre de Nuria, un hombre "recto que no entiende qué hace su hija con un impresentable como Jesús a su lado", explica Alterio, pero que, según Gutiérrez, también es "muy mala persona" porque "no sé si quiere lo mejor para su hija, pero tampoco hace nada por ayudarla".

En el reparto, la suegra de Jesús es Lola Casamayor y el compañero de Nuria del trabajo Vito Sanz.

Alterio, que ha recibido los más prestigiosos premios de televisión por su papel en "Aquí no hay quien viva", confirma que, en cada capítulo, habrá "una boda y una gran metedura de pata y, lo peor, cuando lo intenten arreglar".