Los escritores no se retiran nunca. Mariano Arias, fallecido el pasado mes de mayo, trabajó hasta el último momento. Apenas tres meses antes de su muerte, el filósofo presentaba su ensayo "El Escriba Sagrado. Filosofía del origen de la Idea de Escritura", una revisión de su tesis doctoral que pasaba por ser su última obra. Pero, en realidad, Arias trabajó en sus últimos años en una obra singular, cruce de narrativa, poesía y ensayo: "Imagina bosque imagina". Un volumen que ahora ve la luz, editado por Trea.
"Era un libro al que tenía mucho cariño", sostiene el historiador del Arte Lorenzo Arias, hermano del autor y responsable último de la recuperación de este texto. "Lo trabajó muchísimo, durante varios años, quizás seis", continúa, "salíamos a caminar e iba siempre con el manuscrito. Tengo incluso fotos suyas con los folios. Así que tenía que publicarlo".
Doctor en Filosofía, profesor, fotógrafo y escritor, Mariano Arias dejó tras de sí una intensa obra como ensayista, con trabajos como "La antropología filosófica de Jean-Paul Sartre" (1983) o "Antropología de la escritura" (2005), y una selecta producción como narrador, en la que destaca la novela "El silencio de las palabras" (1991). Como el resto de la obra del que fuera finalista del premio Nadal en 1991 (precisamente con "El silencio de las palabras") y ganador del "Juan Rulfo" de relatos en 1992, "Imagina bosque imagina" es la búsqueda interminable de la palabra precisa. Como afirma el propio Lorenzo Arias en la introducción del volumen: "Mi hermano amaba las palabras, la escritura, y en esta obra se sirve de ellas para descubrir por medio de los personajes que construyen los diálogos de su amistad la propia naturaleza que los acoge y los envuelve en el relato de sus vidas".
Esos personajes a los que alude son un anciano y un joven lector, dos seres en cuyo diálogo va creciendo la obra, engarzando reflexiones propias y ajenas, fragmentos del libro que lee el joven, descripciones líricas de diversos lugares y estampas más próximas a la poesía que a la narrativa. "Si es posible decirlo así, 'Imagina bosque imagina' se podría definir como el relato de la percepción de lo que generalmente llamamos naturaleza en estado bruto, si tal estado y situación fueran posibles. Percepción del espacio natural aún no transformado por el hombre, aún con el riesgo consciente de que la mirada no es imparcial ni totalmente virgen o pura, y no desea instalarse ingenuamente en la observación de la naturaleza", dejó escrito Mariano Arias, en unas palabras introductorias al volumen.
Esta búsqueda, este relato en torno a la percepción de la naturaleza, dialoga además con una cuidada selección de imágenes, unas tomadas por el propio autor y otras extraídas de todo tipo de fuentes, desde bestiarios medievales a tratados de botánica pasando por pinturas al fresco de Giotto. Todo ello fusionado en una edición muy cuidada, plagada de infinidad de detalles en los que se aprecia el cariño con el que se ha editado el volumen, cerrado en 227 páginas a todo color.
"Mariano no se limitó a trabajar el texto, también preparó el diseño, la maquetación del libro. Conservo los folios originales. Sobre esa base, Álvaro (Díaz Huici, de Trea) ha hecho una edición muy cuidada, exquisita", sostiene Lorenzo Arias. El resultado final está a la altura del texto de Mariano Arias, conformando un volumen que, como sostiene Lorenzo Arias, es más que una obra póstuma: "Es un auténtico homenaje a mi hermano".
