Veinte años después de su primera edición, el escritor y académico Carlos García Gual ha publicado una versión ampliada de su "Diccionario de mitos" en el que caben desde los clásicos griegos a Supermán, mitos difíciles de encontrar en la actualidad porque, dice, "el gran héroe ya no es posible".

Editado por Turner, el "Diccionario de mitos" repasa cerca de un centenar de estos personajes de la mano de García Gual, recientemente elegido miembro de la Real Academia de la Lengua y que es además crítico literario y traductor, labor esta última por la que ha recibido dos veces el Premio Nacional de Traducción.

Este diccionario de figuras mitológicas ya causó sorpresa en su primera edición por incorporar, junto a todo el Olimpo griego y los mitos más clásicos, a personajes modernos como Supermán o Carmen. Ahora se han añadido una docena más, entre ellos Don Quijote, Moisés, Tarzán o Sherlock Holmes.

La mitología apela a ese universo fantástico que recoge el diccionario desde Adán a Zeus y en el que García Gual ha buscado los mitos clásicos o los basados en historias o relatos "memorables" sacados de la literatura y de la memoria colectiva que huye de lo real, ha explicado en una entrevista con Efe.

Así, aunque la mayoría de los personajes tratados proceden de la mitología griega, la más presente en la tradición cultural occidental, junto a estos dioses y héroes aparecen en el libro otros más novelescos, más modernos e incluso inventados en el siglo XX.

El mito puede entenderse de varias maneras, ha indicado García Gual, pero el rasgo esencial de los contenidos en este diccionario es "su larga y arraigada pervivencia en el imaginario colectivo".

Frente a Ulises, Edipo o Fausto aparecen otros contemporáneos pero menores porque la sociedad actual tiene mitos pero no son grandes sino "pequeños personajes eco de mitos anteriores".

Mitos como los del cómic, como Supermán, que "son un poco de papel, un tanto planos": "vivimos en una sociedad de masas muy dominada por la tecnología y el héroe individual que hace cosas extraordinarias ya no es posible", sostiene el autor.

"Es muy difícil encontrar un personaje mítico en la actualidad", explica García Gual que señala que, afortunadamente, hay pequeños héroes anónimos, pero las grandes hazañas "no existen"

García Gual cree que hay en la sociedad actual una nostalgia por los mitos, cuya gran difusora en los últimos decenios ha sido el cine aunque las versiones que ha dado de ellos estén adulteradas.

En esta edición, el catedrático ha incluido al diablo, demonio o Satanás: "fue el gran mito que dominaba el mundo pero ahora está un poco olvidado. Hoy día no tiene el crédito o no inspira el terror de otras épocas", señala.

Don Quijote también se estrena como mito en esta edición, un personaje releído y reinterpretado a lo largo de los siglos y asimismo ha incorporado a Sherlock Holmes, mito del buscador de la verdad a través de la inteligencia, o a la diosa egipcia Isis, figura femenina que salva el mundo en su doble condición de esposa y madre.

En la Edad Media surgieron mitos como los de Arturo, el hombre que busca la construcción de un mundo justo e ideal; Tristán e Isolda, que representan el amor fatal y trágico unido a la muerte, y el Santo Grial, que contiene el afán de alcanzar la transcendencia.

Un mito de resonancias actuales puede ser el de Frankenstein, surgido de la literatura por la invención romántica de Mary W. Shelley a comienzos del siglo XIX, y en el que el doctor Frankenstein crea un ser artificial que puede ser comparado a la fabricación de robot.