El primer semestre de 2017 continuó con la tendencia registrada en los dos últimos años de menos nacimientos y más defunciones: entre enero y junio nacieron 187.703 personas (un 6,3 % menos que en el mismo período del año anterior) y murieron 219.835 (4,5 % más).

Son los datos de la encuesta "Movimiento Natural de la Población", difundida hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirman el saldo negativo en el crecimiento vegetativo de la población en 32.132 personas durante la primera mitad del año.

Esta cifra es más desfavorable que la del mismo período de 2016, en el que la diferencia entre nacimientos y muertes fue negativa en 10.145 personas, debido, sobre todo, a la mayor mortalidad registrada en estos primeros seis meses de 2017, especialmente en enero, en el que hubo más fallecimientos.

Además, es destacable que el número de nacimientos de madres extranjeras supuso el 18,7 % del total, frente al 18,2 % del mismo semestre de 2016.

Este año continúa la tendencia decreciente en el número de nacimientos desde 2008, sólo interrumpida por un leve incremento experimentado en 2014.

A pesar de estas cifras, el INE precisa que los primeros semestres de cada año se caracterizan por tener mayor mortalidad y menor natalidad que los segundos.

Respecto a las comunidades autónomas, sólo aumentaron los nacimientos en la ciudad autónoma de Melilla (1,2 % más).

Por el contrario, Castilla y León, con un 9,4 % menos, Castilla-La Mancha, 8,2 % menos, y Comunidad de Madrid, 7,9 % menos, registraron los mayores descensos en natalidad.

Las defunciones se incrementaron en todas, con destacados incrementos en la ciudad autónoma de Ceuta (11,3 % más), Aragón (9,3 % más), La Rioja (7,1 % más) y Castilla y León (7 % más).

El saldo vegetativo (nacimientos menos defunciones) sólo fue positivo en tres comunidades autónomas: Madrid (con una variación del 2,7 % y 5.163 personas), Región de Murcia (3,4 % y 1.327) e Islas Baleares (6,1 % y 301), así como en Ceuta (11,3 % más y 184) y Melilla (3,5 % más y 418).

Las cifras de matrimonios registrados, tampoco fueron muy halagüeñas durante el primer semestre del año, con 68.769 frente a los 73.307 de 2016, lo que supone un 6,2 % menos. Y de ellos, un 2,9 % fueron de parejas del mismo sexo (1.966).

Sólo aumentaron las uniones en el País Vasco (3,9 % más) y fue en Ceuta (18 % menos), Región de Murcia (15,1 % menos) y Melilla (12,2 % menos) donde hubo los mayores descensos.

El INE facilita, además, los datos definitivos de 2016, que reflejan una pérdida de población de 28 personas, ya que se registraron 410.583 nacimientos, frente a 410.611 muertes.

La tasa bruta de natalidad fue de 8,80 de media, que superaron Murcia (10,57) y las ciudades autónomas de Ceuta (12,51) y Melilla (17,19).

Frente a esos datos, Castilla y León (6,82) y Galicia (7,03) tuvieron la tasa más baja de natalidad.

Asturias registró la mayor tasa de mortalidad (12,73) y Baleares, la menor (6,94), aunque la comunidad insular certificó, en cambio, la mayor tasa de mortalidad infantil (3,30), así como Melilla (6,18).

En cuanto a los matrimonios, se registraron 175.343 durante 2016 y la edad media de la primera unión se situó en los 33,95 años.

Durante 2016, España tuvo una tasa de mortalidad infantil de 2,68, la edad media a la que se accedió a la maternidad fue de 32 años y el índice de fecundidad de 1,34.