Hay grandes historias de superación y las del andorrano David Aguilar es una de ellas. Tiene 18 años y acaba de construirse una prótesis de brazo articulado con piezas de Lego. Y es que Aguilar padece una malformación en su brazo derecho, lo qure produjo que no se desarrollara por completo su antebrazo y su mano.

Así, su pasión por la tecnología -algo que lleva desarrollando desde que era un niño- ha dejado de ser una afición para convertirse en una vocación: crear cosas para ayudar a la gente. Una forma de mejorar su calidad de vida que le ha llevado a ser felicitado incluso por la marca de piezas de juguete, que conoció el caso a través de Facebook gracias a una publicación del padre de Aguilar, que tiene familia en Seu d´Urgell.

Aguilar ha convertido lo que anteriormente había sido un helicóptero en toda una utilidad que le permite coger cosas con el brazo e incluso hacer flexiones. Algo que ya había intentado cuando tenía nueve años y que no pudo llevar a término. Entonces tan solo era un niño, ahora estudia Bachiller Tecnológico para convertirse en ingeniero aeronaútico, aunque también se decanta por la informática y la robótica.