De una fiesta para pinchar discos y recordar los ochenta nació un libro que relata la música de aquel entonces y que varios protagonistas vinculados a la escena (a través de radios, cabinas de salas y bares o artículos de prensa) evocaron, haciéndolos sonar nuevamente. Toño Barral, escritor musical, productor e investigador fonográfico, plasma en "Fiesta 80's (22 hits a 45 r.p.m.)" los veintidós discos que pinchó en aquella cita. En la edición se incluyen esas piezas con sonido analógico en una casete. El libro se presenta esta tarde, a las 19.30 horas, en la librería Santa Teresa de Oviedo.
- ¿Cómo se planteó usted las crónicas? ¿Son relatos independientes?
-Truman Capote lo acuñó como "literatura de no ficción". Cada uno de los veintidós títulos tuvo por lógica un tratamiento específico, al ser bandas y canciones diferentes. Hasta no acabar con uno no pasaba al siguiente. Hay grupos ("New Order", "The Smiths", "REM", "The Cure", "The Pogues") a los que vi bastantes veces y con los que estoy ligado de forma muy íntima, así que las crónicas son, como dijo Tom Wolfe, experiencias reales vividas por el escritor. Eso que bautizó como nuevo periodismo, un género que cultivo, le debo mucho a los libros amarillos de Anagrama de los 80.
- El libro nace de una fiesta ochentera. ¿Cómo ve ahora los ochenta?
-La música no entiende de nostalgias, compositores geniales como Bach o Prince son eternos, escuchas ahora "Straight no Chaser" de "Thelonious Monk" y es absolutamente moderno aunque tenga 50 años.
- Fue recuperar el ambiente de Oviedo de aquel entonces, ¿era más activo (Oviedo) que ahora mismo?
-No sabría responder, hace muchísimos años que no salgo por las noches, sólo voy a conciertos y ahora hay mucha más actividad en directo que nunca.
- ¿Hay más de asuntos personales que de su gusto de oído?
-El propio criterio de selección, singles UK/USA de los 80 para una fiesta navideña nocturna, despejó bastantes dudas. Obviamente, todas las canciones me gustan, escribir sobre ellas vino más tarde.
- ¿Encontró mucho amigo por el camino?
-Los amigos que haces cuando eres un veinteañero son para siempre, echo de menos a los muchos que se llevó la heroína por delante.
- ¿Le costó seleccionar sólo veintidós canciones?
-No, sabía el tiempo que me correspondía en el set y una vez decidido que no pondría singles españoles de esa generación prodigiosa -en especial hasta la mitad de la década- fue más fácil la selección.
- ¿La retahíla de grupos que aparecen en el libro han sido de su gusto o más bien que pasaron por su vida?
-Son todo hits, de ahí el subtítulo del libro: éxitos muy populares de esos artistas que, como dije antes, con algunos tengo una vinculación muy emocional y con otros no tanta. Pretendí hacer una especie de mural musical de la década que reflejase la enorme creatividad de entonces, por eso hay rap, new wave, post punk, hip hop, pop, rock, r&b, synth?
- Y el libro queda "grabado" con una casete que acompaña la edición.
-Con sonido analógico. De vinilo single a cinta, para una microtirada de cien copias, ha merecido la pena el curro artesanal. Me gusta mucho el formato casete, la semana pasada iba con un amigo que tiene reproductor en el coche y nos lo pasamos genial escuchando una vieja grabación original de Hendrix que sonaba impresionante; además, las cintas se deterioran menos que esa mierda de rodaja de plástico, el CD.
