Carmen González, doctora en Estética y Teoría del Arte por la Universidad de Salamanca, donde es profesora, inauguró ayer la muestra "La parte mínima del todo" en el Museo Antón de Candás. Una exposición, avisa la artista, "muy diferente a todo lo que he hecho anteriormente".

Santiago Martínez, profesor en la Escuela de Arte de Oviedo y comisario de la muestra, explica que "Carmen nos enseña a ver la pintura de otra manera, más allá del plano bidimensional". Parte de una sala "que habla de la bidimensionalidad de la pintura", pero "cuando nos trasladamos a los otros espacios, la pintura se despega del marco, se rebela contra él y ocupa el espacio, pasa a una mezcla entre lo bidimensional y lo tridimensional".

Total acuerdo con la artista, que quiere "trasladar la pintura al espacio tridimensional". Una idea forjada en su estudio de pintura, pero "lo importante era encontrar el espacio adecuado para esa idea". Y ese espacio lo encontró Carmen González "aquí, en el Museo Antón, dialogando con un centro de escultura".

Esta exposición "es un diálogo entre escultura y pintura, por eso éste es un sitio apropiado", afirma la autora, al tiempo que señala que en esta muestra, "la pintura se expande en el espacio".

El discurso expositivo parte de "la pintura tradicional en la primera sala, pintura bidimensional, sobre lienzo". A partir de ese plano bidimensional, la muestra "presenta acumulaciones de forma, unidades mínimas que van creciendo no solo en acumulación y tamaño, sino que dejan el espacio bidimensional y toman el espacio tridimensional".

Las esculturas resultantes están "pintadas en óleo sobre papel. La pintura presenta dos caras, interior y exterior, convirtiéndose en objetos tridimensionales que se acumulan y toman el espacio con un contraste de color muy fuerte, un cromatismo intenso". El resultado es que "cuando te mueves alrededor de la obra, toma diferentes caras y posibilidades de color. Es una pintura más sensible no solo a lo visual, sino al movimiento del cuerpo en el espacio".

El mensaje es claro: "Una unidad, por pequeña que sea, en una acumulación o diálogo con otro conjunto de cosas puede montar algo más complejo. El conjunto de los elementos son poderosos aunque sean algo mínimo".