Se acabó el sueño. Oskar Proy, el joven de 18 años que acudió a La Voz Australia cantando el "Asturias patria querida" para intentar paliar la demencia de su abuela, ha sido eliminado hoy del programa en el que concursaba. Tenía que competir contra otros dos candidatos y no pudo ser. El joven participaba en el programa con la canción "Supermarket Flowers" de Ed Sheeran que acabó significando su salida.

Muy cotizado en Asturias

Todos quieren a Oskar Proy, Cangas de Onís y la organización del Sella ya le han invitado a cantar y conocer la región. El Ayuntamiento de Cangas de Onís, donde se sitúan sus raíces familiares, ha hecho una invitación oficial al joven de 18 años para que conozca la tierra de su abuela, a la que le dedicó su interpretación del "Asturias, patria querida" en el programa. El alcalde cangués, José Manuel González Castro, felicita al joven intérprete australiano por su "sorprendente versión" y le invita al "lugar de origen de su familia" en "este año tan especial", en el que Cangas de Onís conmemora tres hechos históricos: los centenarios de la coronación de la Santina y de la declaración del parque nacional de la Montaña de Covadonga y el decimotercer centenario de los orígenes del Reino de Asturias y la la proclamación de Pelayo como rey.

La 82 edición del Descenso Internacional del Sella podría contar con la presencia del cantante Oskar Proy. El presidente del Comité Organizador del Descenso (CODIS), Juan Manuel Feliz, se ha puesto en contacto ayer mismo con Proy para felicitarlo por su "emocionante versión del Asturias" e invitarlo a cantar el himno a la salida de Les Piragües, el próximo día 4 de agosto. Los organizadores de la prueba piensan en la "cantidad de gente que vendría sólo para escucharlo" y destacan la capacidad de esta versión para "poner los pelos de punta más allá de nuestras fronteras". "Si viene Oskar con el éxito que tuvo sería un puntazo", sentencia Feliz.

La familia, sorprendidos

Edgard Proy y toda su familia están sorprendidos y muy agradecidos con todo lo que está pasando con su hijo, Oskar Proy. Viven en Victoria, cerca de la costa. Su madre, la asturiana Mónica Proy, de 81 años, y su delicado estado de salud llevaron a Edgard a pedir a su hijo que le cantara a la abuela el himno de Asturias para hacerla recordar, una canción que ella adoraba, tras ser diagnosticada con demencia senil.

"Mi madre nació en la casa familiar de su padre en La Granda, en 1937, en plena Guerra Civil. Su padre, Ernesto Díaz, murió durante la contienda. Ella vivió parte de su infancia y adolescencia en Llano de Margolles, en la casa de la familia de su madre, que se apellidaba Huergo. Mamá se trasladó a Australia porque pensaba que había algo más allá de su pueblo, quería conocer mundo. La vida no siempre fue amable con ella. Me contaba que veía pasar los aviones y soñaba con abrir también sus alas y partir lejos, pero se sentía muy ligada a su familia y a su tierra, Asturias, y le costaba mucho tomar una decisión. Por casualidad, en 1962 supo que Australia era una tierra de futuro y que allí demandaban inmigrantes, y para allá partió. Tendría unos 25 años. A mamá eso le pareció una llamada del destino, por lo que se armó de valor y, con dolor de corazón, con 25 años viajó finalmente a una tierra nueva y extraña", señala su hijo.

Para toda la familia del joven Oskar, los padres son unos pilares fundamentales, un espejo en el que mirarse. Así, señala Edgard Proy que "mi madre también trabajó cuidando ancianos. Ella siempre antepuso las necesidades de los demás a las suyas y es muy querida por cuantas personas trató. Ahora es ella la que precisa de nuestros cuidados, así como mi padre, que también ha enfermado. Sus vidas se han vuelto del revés pero están con nosotros, nunca renunciaremos a su maravillosa presencia, les amamos".

Como su hijo, es consciente también del apoyo, el cariño y el seguimiento que Oskar tiene en Asturias y también en el resto de España. Así, dice que "somos conscientes del maravilloso apoyo a Oskar. Estamos muy orgullosos de nuestro hijo y del valor que tuvo para presentarse a concursar con una canción tan personal y en otro idioma. En Australia muchas personas que no entienden el español, y aunque les parezca extraño, se emocionaron al escuchar 'Asturias, patria querida'. ¡Es una canción tan bella! Desde Australia sólo puedo decirles muchas gracias, de corazón, a todos los asturianos y españoles por sus deseos y por su apoyo".