La programación teatral asturiana está en riesgo. El sistema de contratación de obras de teatro de los Ayuntamientos, cofinanciada por el Principado de forma directa, cambia por completo y los consistorios tendrán que adelantar el dinero de las funciones y luego solicitar una subvención para cubrir la mitad del gasto. Este giro, que será aplicado por la Consejería de Cultura para cumplir la nueva ley de contratos del Estado, "se carga al teatro", claman el sector teatral de la región.
El circuito de Artes Escénicas del Principado de Asturias, hasta el momento, funcionaba de la siguiente manera: los 23 ayuntamientos asociados a este ciclo seleccionan su programación teatral cada semestre y pagan la mitad del caché de la compañía. La otra mitad, le corresponde a la Consejería. Los pagos se liquidan cada seis meses. En total, cada una de las partes destina 300.000 euros al año a la escena asturiana.
El cambio que propuso ayer el viceconsejero de Cultura y Deporte, Vicente Domínguez, en una reunión de trabajo con los responsables de la programación teatral de los diferentes ayuntamientos, termina con este modelo para cumplir con la ley de contratos que entró en vigor el pasado 9 de marzo. Con esta ley se pretende controlar los contratos con un solo proveedor que superen un importe de 15.000 euros. Los ayuntamientos, según las fuentes consultadas, no pagan a ninguna compañía teatral más de esta cantidad. No ocurre lo mismo con el Principado que, al sumar los pagos de cada ayuntamiento a un mismo proveedor artístico, sí supera la cifra límite.
"Todos contratamos las mismas compañías porque son las mejores; el problema es que en estos contratos no se contemple una excepción en temas culturales: no es lo mismo un proveedor de hormigón que una obra de teatro", explica Alain Fernández, gerente del teatro Prendes de Candás. Cree que los cambios ahogan a los ayuntamientos más pequeños.
Con el nuevo modelo de subvención -y no el de cofinanciación, como hasta el momento- los ayuntamientos tendrán que adelantar el importe total de cada función y luego acogerse a una subvención. "Esto supondrá la disminución de la programación teatral, por no decir la desaparición", asegura Fernández.
Una opinión que comparte Ramón Quirós, de la casa de cultura de Siero. Asegura que los ayuntamientos pequeños "tendrán problemas para programar". Adelantar todo el dinero será complicado, asegura y añade: "Tendremos que pedir una subvención sin saber qué van a subvencionar exactamente".
A juicio de quienes se encargan de la programación teatral de los ayuntamientos, con el nuevo modelo toda la responsabilidad cae en el consistorio y se pierde el programa conjunto que funciona hasta el momento. Son partidarios de que se mantenga el criterio que se venía siguiendo hasta ahora: un trabajo de cooperación entre el Principado y los ayuntamientos.
Desde la Consejería no han querido hacer declaraciones al respecto por tratarse de "una reunión de trabajo", pero la mayoría de los asistentes a ese encuentro se mostraron molestos con las decisiones tomadas. Aunque, matizan, todavía está por ver cómo se va a articular este sistema de subvenciones. Por el momento, la reunión de ayer fue una sesión informativa para poner sobre aviso a los gestores de la programación teatral de la nueva situación.
Compañías
Las compañías teatrales asturianas también mostraron ayer su descontento. "Si esta es una herramienta legal para cargarse el teatro, tendremos que aguantarnos... menos mal que habrá elecciones pronto". Así de contundente se mostró Etelvino Vázquez, de la compañía Teatro del Norte. Le da la impresión de que no hay voluntad de resolver los problemas que acarrea la nueva ley sin perjudicar el trabajo de las compañías. "Esta legislatura ha sido nefasta para el teatro", sentencia.
El circuito de Artes Escénicas del Principado es un "programa de acción que tiene por objeto optimizar los recursos disponibles y procurar una programación estable y de calidad, prestando especial atención a las producciones asturianas", tal como se define en la página web del Gobierno del Principado de Asturias.
