"Las sensaciones son positivas, pero no me voy feliz a casa. Me gusta ganar a todo". Abelardo se queda con la sensación de que el Sporting mereció mejor suerte, por juego y ocasiones, ante un Valencia al que dominó durante gran parte del segundo periodo. "El fútbol ha sido injusto con nosotros. Hemos tenidos ocasiones para adelantarnos; el resultado no refleja lo que se vio sobre el campo", lamenta el Pitu. El técnico rojiblanco asume que no puede pedir más a sus futbolistas porque "se han vaciado. Los catorce que han jugado han estado a un nivel impresionante, pero cuando no materializas tus oportunidades, un rival como el Valencia acaba demostrando su calidad".

"Hice tres cambios porque creía que era el mejor equipo para jugarle al Valencia. Por eso hice tres, lo mismo que podía haber cambiado cinco o repetir el once", se limita a explicar Abelardo sobre la decisión de dar entrada a Mascarell, Pablo Pérez y Halilovic, en lugar de Guerrero, Nacho Cases y Carmona. El Sporting volvió a probar el sabor de la derrota en El Molinón casi nueve meses después, ya que hay que remontarse a enero para encontrar la última. "Ahora tenemos dos salidas complicadas, pero las sensaciones son buenas. Vamos a sufrir muchísimo, la Primera es esto: dominar, tener ocasiones, pero te llegan y te meten un gol", lamenta.

Abelardo reconoce que la forma en la que llegó el gol che, en el descuento, ha frustrado al vestuario. "Los jugadores están tristes, porque saben que lo han hecho bien, pero el premio ha sido ninguno a sus merecimientos", señala. El Pitu admite que, de cara a puerta contraria, "hay que trabajar más la finalización, pero sabíamos que ya teníamos ese problema el año pasado. Son chavales jóvenes, muchos de ellos se están formando, es normal que fallen".