Lo primero que hizo José Ramón Sandoval a su llegada a Gijón, fue volver al templo. El técnico, tras dejar los bártulos en el hotel, quiso acompañar al autocar del Granada y a sus auxiliares hasta El Molinón, donde ya lo dejaron todo preparado para el choque de esta noche. Fue allí donde Sandoval tuvo la ocasión de saludar a algunos empleados rojiblancos, ya que nadie del club hizo esta vez de anfitrión en el hotel del conjunto nazarí. Esta mañana, el Granada se entrenará en Mareo.

José Ramón Sandoval tuvo una plácida llegada a Gijón. El entrenador madrileño y el resto de la expedición del Granada, hicieron su aparición en el hotel NH Gijón a las 18.28 horas. Allí les esperaban una veintena de aficionados. Sandoval fue el principal foto de atención, por su pasado reciente en el banquillo del Sporting.

El técnico se mostró cercano y sonriente con los cazadores de autógrafos y no dudó en hacerse fotos con todo aquel que se lo pidió. Incluso el de Humanes tuvo tiempo para bromear con un joven seguidor que le enseñó una fotografía tomada durante su estancia en el Sporting. "Que bien me cuidaba en Gijón", indicó con tono jocoso José Ramón Sandoval. El técnico se encontró con pocas o ninguna cara conocida en su vuelta a la ciudad, ya que no asistió a la recepción ningún representante del club, ni tampoco se acercó a su llegada al hotel ningún componente que tuviese relación con el Sporting. El técnico regresó a Gijón y hoy se sentará nuevamente en el banquillo de El Molinón, aunque lo hará en el de visitante y con la presión de la grada sportinguista, que intentará aupar a los suyos hacia el triunfo.