La lesión de Castro es más sensible de lo que se esperaba. El delantero rojiblanco continúa sufriendo mareos derivados de la contractura cervical que se produjo la semana pasada, al desmayarse tras someterse a una extracción de sangre. La lenta evolución de su dolencia, que incluso le ha impedido ejercitarse con normalidad en el gimnasio, le convierten en seria duda para recibir al Málaga. El que sigue entrenándose con normalidad es Cuéllar. Los planes de Abelardo es que el emeritense pueda estar a disposición el domingo.

Abelardo espera por Cuéllar y Castro mientras que Sanabria, descartado para el domingo, ha empezado ya a realizar carrera continua. El paraguayo se dejó ver sobre el césped de Mareo en el entrenamiento posterior al enfrentamiento al Athletic y su evolución parece seguir un proceso normal. Lo más preocupante es el estado de Castro. El futbolista, que asume el aviso lanzado por Abelardo solicitándole un mayor esfuerzo a la hora de ponerse a la altura del resto del equipo en lo físico, no ha podido reintegrarse al grupo. El de Ujo deberá guardar cierto reposo para intentar recuperarse de su dolencia en las cervicales y sigue teniendo que usar el collarín. No parece probable que esté listo para jugar ante el Málaga.

Cuéllar, por su parte, sigue empleándose a fondo para poner a prueba su rodilla. El guardameta rojiblanco trasladó al Pitu que tiene ciertas dudas sobre el estado de su lesión, aunque los servicios médicos le sitúan como pendiente de evolución. Todo dependerá de sus sensaciones, al final de la semana, momento en el que se tomará la decisión de si podrá tomar parte de la convocatoria. Abelardo estará obligado a introducir cambios el domingo. Nacho Cases cumplirá partido de sanción al haber visto la quinta amarilla ante el Athletic. Mascarell y Sergio repetirán, por tanto, en el centro del campo.