El aprendizaje también contempla castigos, y el Sporting sufrió en San Mamés uno de esos correctivos que a veces sirven para crecer. Al menos, así lo interpreta el vestuario rojiblanco, centrado en pasar página tras asumir que lo visto ante el Athletic es una muestra de las muchas dificultades que restan para conseguir la permanencia. No estaban acostumbrados los rojiblancos a digerir un resultado como el de Bilbao, el más severo de la temporada y también el más contundente de la etapa de Abelardo en el banquillo. El equipo del Pitu sólo había perdido una vez por tres goles de diferencia. Ocurrió la pasada campaña, en la visita al Valladolid. Sin embargo, en aquella ocasión el dominio rival no fue tan aplastante.

El Sporting se ha encontrado con una dura vuelta a la realidad de todo recién ascendido. Los rojiblancos se vieron sometidos por el Athletic tras plantar cara a equipos como el Real Madrid y el Valencia. "Ha sido el primer partido en el que fuimos inferiores al rival", asumió Abelardo tras el encuentro. El Pitu tiene por delante una semana para corregir errores y evitar que lo visto en Bilbao pase demasiada factura a la plantilla. El vestuario, que sólo tuvo que lamentar dos derrotas en toda la pasada campaña, debe aprender ahora a sobreponerse del escaso margen de contemplación que existe en Primera.

Lo más preocupante es que la filosofía del Sporting se vea afectada. Abelardo ha dado continuidad a su apuesta por un conjunto seguro en facetas defensivas, un aspecto vital en los planes del técnico. Las últimas dos jornadas han hecho temblar los cimientos. Seis tantos ha recibido el equipo ante Granada y Athletic. No existe precedente con el entrenador gijonés en el banquillo.

Otro de los frentes abiertos es cómo acabar de aprovechar al máximo las virtudes del, a priori, futbolista más desequilibrante. Halilovic volvió a partir desde la banda derecha en la visita a Bilbao, una zona en la que ha tenido menos protagonismo que cuando actúa como mediapunta. Abelardo incluso corrigió su situación dentro del campo tras el descanso, pero tampoco fue suficiente para detener a un Athletic que continuó con su papel preponderante. El extremo derecho sigue siendo uno de los quebraderos de cabeza del banquillo.

El Sporting también parece acusar la ausencia de Sanabria. El equipo ha logrado ocho de sus nueve puntos con el paraguayo sobre el campo. Su influencia en el juego, con ayudas tanto en el plano ofensivo como a la hora de aguantar el balón hasta la llegada de sus compañeros, han sido claves. El equipo se centra ahora en lograr, ante el Málaga, la primera victoria de la temporada en El Molinón. Ambos llegan al choque empatados a nueve puntos.