"Esta semana he encontrado ese puntito de confianza que hacía falta y estoy contento por volver a la convocatoria y estar con el equipo". Iván Cuéllar despejó las dudas. El Pichu regresa a una convocatoria después de seis partidos de ausencia y apunta a titular en el encuentro de esta tarde ante el Málaga. La decisión final la tendrá Abelardo, pero Cuéllar avisa de que "estoy preparado para jugar".

El portero acude al rescate del equipo en el momento de mayor inseguridad defensiva. Nunca antes, el Sporting había concedido tantas ocasiones como en los dos últimos encuentros.

Cuéllar explicó porqué no se vio en condiciones de jugar en las dos semanas anteriores, ante el Granada en El Molinón y el Athletic en San Mamés, en las que ya parecía tener el visto bueno médico: "Va por sensaciones. Había que incidir en un proceso de fortalecimiento de la periferia de la rodilla, para que esa seguridad existiera a la hora de los giros y de cargar peso". El extremeño tampoco tuvo reparos en detallar el origen de una lesión que no es nueva para él y cuyos síntomas identificó rápidamente. "Viene de una molestia que ya me apareció hace un par de años, son los mismos síntomas. La diferencia fue que entonces apareció al finalizar la temporada y la recuperación fue durante el verano", señala para añadir que "no había otra que parar". Cuéllar lamenta que "el deporte profesional tiene una exigencia tan extrema que castiga las articulaciones". El extremeño sostiene que "no se traducía en dolor, eran molestias que podían propiciar dolor e inflamación".

Cuéllar evitó valorar la importancia del encuentro de esta tarde ante el Málaga y se limita a señalar que ha visto bien al equipo en su ausencia porque "hemos estado serios en defensa y contundente en ataque. Quizá el último partido en casa fue más complicado de lo esperado, entiendo que no debíamos de haber sufrido tanto, pero al final sacamos un empate muy valioso". El guardameta remarca que "es una categoría diferente de Segunda, los rivales tienen más potencial, más pegada".

Pichu se muestra tajante al asegurar que "nosotros tenemos el objetivo claro y nadie tiene que engañarse". El extremeño pide el apoyo del sportinguismo porque "aunque sea duro, es un año para disfrutar, esta gente se lo merece, se ha ganado un respeto". El portero argumenta que "llevamos dos años con unas limitaciones para fichar, pero contamos con nuestra afición y nuestro campo, algo que no tienen nuestros rivales". Cuéllar resta importancia al número de goles recibidos: "No me preocupa que me hagan 150 goles si el equipo se mantiene en Primera".