La primera vez que el nombre de Alen Halilovic se puso sobre la mesa como una opción para reforzar al Sporting, a todo el mundo en el club le pareció muy complicado ver a la estrella croata con la camiseta rojiblanca. Un año antes, el Barcelona le había pagado 2,2 millones de euros por el que estaba reconocido como el mejor juvenil del mundo. Tras el descenso del filial azulgrana, el Barcelona puso a Halilovic en el escaparate. Se le buscaba una cesión que fuese buena para su crecimiento y que le garantizase minutos de competición al primer nivel. El Sporting entró en una puja con clubes de media Europa, entre ellos alguno del potencial del Borussia Dortmund o el Wolfsburgo alemanes. La oferta del Sporting incluía, además, que fuera el propio Barcelona quien se hiciese cargo de la elevada ficha del futbolista.

Abelardo logró el visto bueno de su amigo Luis Enrique y del director deportivo azulgrana, Robert Fernández. El Pitu afrontó entonces la tarea más compleja, convencer al futbolista y su entorno de las bondades de una cesión en un equipo recién ascendido y favorito a pasar apuros según la mayoría de las casas de apuestas.

Dos meses después, Alen Halilovic es el nuevo ídolo del sportinguismo. A pesar de su timidez, el croata está feliz en Mareo y en la ciudad, en la que siente el cariño de sus nuevos seguidores. Su integración a un vestuario joven ha sido sencilla. Más aún, cuando sus compañeros reconocen la calidad futbolística y humana de la joven estrella culé.

Halilovic llegó a Mareo en la misma semana del inicio de la competición, por lo que Abelardo decidió no alinearlo en el choque ante el Real Madrid. Desde entonces ha sido un fijo en las alineaciones del técnico. Halilovic ha disputado los nueve partidos restantes y ha sido titular en ocho de ellos, acumula 683 minutos disputados, ha recibido nueve faltas, ha cometido siete y ha visto dos tarjetas amarillas. Además tiene un porcentaje de pases buenos del 80%, el jugador del Sporting con remates a puerta (14) y el que tiene un mejor porcentaje de regates conseguidos (61%).

Más allá de las estadísticas, Halilovic se ha convertido en el auténtico líder del Sporting. A estas alturas, y a la vista de su rendimiento en las dos posiciones que ha venido ocupando, resulta evidente que el croata es mucho más determinante en la media punta que en banda derecha, desde donde traza diagonales demasiado largas para llegar a posición de disparo o de último pase.

Dentro del vestuario y del club en general, además de rendirse a la calidad del croata, los mayores elogios los recibe su profesionalidad y la humildad con la que se ha puesto a las órdenes del cuerpo técnico desde su llegada a Gijón. Halilovic es un chico tímido, a pesar de que se desenvuelve perfectamente en castellano para el poco tiempo que lleva en el país.

Su actuación estelar ante el Málaga ha recibido infinidad de elogios en la prensa nacional, que se han hecho extensivos al entrenador rojiblanco Abelardo, al que muchos señalan como el responsable del evidente crecimiento de Halilovic desde su llegada a Gijón. No hay que olvidar que el croata firmó una discreta temporada en el curso anterior y que no pudo evitar el descenso del filial azulgrana a Segunda división B. En el Sporting parece otro futbolista. Incluso ha mejorado en la faceta defensiva, a pesar de que no es una labor que le salga de forma innata.

En la sociedad que forma con Tonny Sanabria, otro gran futbolista que se recupera de una lesión, está puestas muchas de las esperanzas del sportinguismo de que el equipo logre la permanencia esta temporada. El equipo tendrá mucho ganado si logra mantener la seguridad defensiva y estos dos futbolistas están inspirados. Alen Halilovic sirvió ante el Málaga su primer culín para celebrar un gol. Y con ese gesto, se ganó a toda una afición.