Los aplausos, casi unánimes, de El Molinón han añadido normalidad a la situación de Ndi. El camerunés, silbado cuando su nombre fue anunciado por megafonía, en el momento de anunciar el once titular del Sporting ante la Unión Deportiva Las Palmas, acabó cambiando la opinión de muchos. En su primer partido en casa, después de los casi ocho meses al margen del primer equipo por sus actos de indisciplina, el jugador terminó siendo premiado por su intensidad y esfuerzo, especialmente en labores de presión. Una actitud que mejoró la mostrada en su anterior etapa en el equipo.

El Sporting mantiene la idea de intentar proteger, lo máximo posible, la imagen pública de Dani Ndi. Por el momento, el club impide que el camerunés realice declaraciones, a no ser que sea solicitado para una entrevista por algunas de las televisiones que poseen los derechos de retransmisión. Algo que, por imperativo contractual, deberían aceptar. El futbolista comparte el deseo de la entidad y se ciñe a los planes, a la espera de atender las peticiones. Su situación no invita a que vuelva a romper con las reglas establecidas.

Lo cierto es que la vuelta del camerunés al equipo ha dado mayor margen de maniobra a Abelardo y también ha contribuido a mejorar el rendimiento ofensivo del equipo. Todo ello, unido a los aplausos que recibió por parte de la afición, se convierten en un paso más hacia el crecimiento del camerunés, que aspira a recuperar la confianza de sus compañeros y del sportinguismo.