La Navidad se ha adelantado para el Sporting. El partido aplazado ante el Barcelona ha permitido a Abelardo dar una semana de vacaciones a sus futbolistas, que comenzará tras el entrenamiento de esta semana. La plantilla ya vivió ayer un día atípico en el que el entrenamiento se trasladó al Palacio de Deportes de La Guía. Antes de comenzar la sesión, los futbolistas hicieron de actores para un spot publicitario con uno de los patrocinadores. Dentro de la cancha, Abelardo cambió el balón y organizó una especie de torneo de baloncesto en el que destacó, de nuevo, Alen Halilovic, que llegó preparado para el asunto con una camiseta de Kevin Duran.

Una vez concluido el entrenamiento, técnicos y futbolistas se dirigieron al restaurante Bellavista donde tendría lugar la comida de navidad del club. Estaban invitados todos los trabajadores de cualquier condición de la entidad. De entre los futbolistas faltaron Alberto, que ya se ha trasladado a Barcelona ante su inminente paternidad, Luis Hernández por un asunto personal y Juan Muñiz que tenía un examen.

A la hora de los brindis, tomó la palabra el presidente del club, Antonio Veiga quien dio las gracias a los empleados por "su dedicación y por su paciencia en ciertos momentos". A los jugadores les dijo que son "el auténtico motor y realidad del club. Los éxitos del equipo son los que lo sitúan en su dimensión al club". Abelardo tomó la palabra para decir que tiene "los mejores jugadores del mundo". También el capitán Lora se dirigió al personal del club y les habló "del compromiso del equipo con la entidad". A la hora de levantar las copas, Antonio Veiga le cedió el protagonismo a Quini, quien brindó "Por el Sporting, por una buena temporada y por otro año en Primera".

Por la tarde, Halilovic y Carlos Castro acudieron a la tienda del club a firmar autógrafos y colapsaron la calle de San Bernardo con una cola gigantesca.