Hay días en los que vale más no levantarse. Le sucedió ayer a Abelardo que, de una tacada, puede haber perdido a dos de sus grandes argumentos ofensivos. Tonny Sanabria está descartado para la final de esta semana ante el Rayo Vallecano y Dani Ndi es seria duda, aunque esta misma mañana se someterá a última prueba. Abelardo se muestra poco optimista. El jueves negro fue ayer. Hoy el Sporting intentará levantarse con mejor pie y, como tantas veces han hecho estos guajes, poner buena cara al mal tiempo, presentar batalla a un Rayo Vallecano que no conoce la derrota en la segunda vuelta y dar un nuevo paso adelante en su carrera por la permanencia.

La visita del Rayo Vallecano a El Molinón está marcada con rojo desde hace semanas y ha recibido el tratamiento de los grandes partidos. El consejo estableció una política de precios reducidos para compensar el horario de viernes y Abelardo llamó al sportinguismo a encender la caldera. Incluso desde el vestuario se había reconocido cierto ánimo de desquite por las extrañas circunstancias que envolvieron a la derrota de la primera vuelta en Vallecas, donde Bernardo fue expulsado de forma injusta en el primer tiempo en una acción en la que se señaló un penalti más que dudoso. Tras el descanso se escamoteó una pena máxima a favor de los rojiblancos y, para colmo, Sanabria recibió un golpe en la cabeza y jugó conmocionado durante algunos minutos.

El Sporting no pierde de vista al goal average particular, que a la vista de la enorme igualdad reinante puede volver a ser decisivo como lo fue ya en el ascenso rojiblanco de la temporada anterior. A estas alturas no se puede descuidar ningún detalle.

Abelardo lucía ayer un enfado importante. Consciente de lo mucho que pierde con la ausencia de su máximo goleador y la probable baja de un futbolista de la importancia de Ndi. La única buena noticia de la jornada fue la recuperación de Vranjes, quien todo apunta a que estará en condiciones de jugar. La idea del Pitu era la de mantener el bloque que ha sumado siete de los últimos nueve puntos. Las bajas no se lo permitirán. Guerrero parece el mejor colocado para sustituir a Sanabria y Halilovic sería la alternativa natural a Dani Ndi.

El Rayo viaja a Gijón con algunas ausencias significativas. No estará el máximo artillero de los vallecanos, Javi Guerra, quien había perdido la titularidad en los últimos encuentros en beneficio de un Miku enrachado. Tampoco podrá contar Jémez con el central Ze Castro, baja por enfermedad, ni con el centrocampista Baena, con problemas físicos. Tito será el acompañante de Llorente en el eje de la zaga, e Iturra escoltará a Trashorras en la medular. El Rayo comparece con una delantera temible. Por delante de Trashorras y lanzados por el gallego están Bebé, Jozabed, Pablo Hernández y Miku. Una nómina de atacantes que son un lujo en un equipo modesto.

Uno de los centros de interés del encuentro estará en conocer la reacción de El Molinón tras haberse conocido que Jony ya tiene encarrilado su futuro lejos de Gijón. En principio no parece el momento adecuado para cobrarse ese tipo de facturas. Jony, como Luis Hernández, tiene que ser un jugador importante para el Sporting en lo que queda de temporada. De ello dependen muchas de las opciones de lograr la permanencia. La primera cita es esta noche, en un partido que conviene no perder.