"Papá, voy a llevar la misma camiseta que tuvo Luis Enrique". Pablo Fernández heredó hace un año la misma prenda que lució el ahora entrenador del Barcelona durante su etapa en el Xeitosa. Símbolos, un año despúes, retirados, pero que Brito utiliza para alimentar la ilusión de los pequeños. Además de a este gijonés de siete años, cita también para su encuentro con LA NUEVA ESPAÑA a Ayman Elkilani, otro niño que, con siete años, sigue los pasos iniciados por Abelardo y Luis Enrique. "Tienen talento, pero les recuerdo que para ser como ellos tienen todavía que trabajar mucho y, sobre todo, disfrutar", dice el técnico gijonés. El túnel del vestuario del colegio San Miguel, que recuerda a los de los grandes estadios, es otro de esos estímulos que esconden el secreto de los éxitos del Xeitosa.