El Sporting se cuela en la comparecencia de Luis Enrique. El técnico gijonés vuelve a casa al frente de una constelación de estrellas que deslumbra al mundo. Será un partido difícil para Luis Enrique que ocupará el banquillo visitante del campo en el que se hizo hombre. "Hace muchos años que salí de Gijón, pero soy entrenador del Barça y no es difícil prepararlo. El escenario significa mucho para mí, es mi casa, pero manda el trabajo y mi obligación es ir a por tres puntos que son básicos". El técnico aparenta naturalidad, pero no esconde sus sentimientos: "Soy socio desde hace infinidad de años, sportinguista desde la cuna y hasta la muerte, pero a veces tenemos que pensar de otra manera".

Luis Enrique llega al frente de un Barça que encadena 31 jornadas invicto. El técnico bromea con la posibilidad de que perder en Gijón. "Si se tiene que acabar en algún sitio que sea en El Molinón, pero espero que no termine", comenta. Los guiños del técnico a su exequipo fueron continuos. También tuvo palabras de elogio para Abelardo, su rival de esta tarde, su amigo de siempre. "Desde los siete años hemos ido juntos al colegio. Es una persona muy importante, muy cariñosa, tenemos una relación perfecta y el tiempo sólo hace que mejorar esa relación", señala.

Como buen aficionado, Luis Enrique acostumbra a ver los partidos del Sporting, por lo que tiene bien estudiado a su rival. Luis Enrique admira también del Pitu en el banquillo con un equipo plagado de guajes, al que mantiene fuera de los puestos de descenso. "Controla a su equipo a la perfección", apunta al tiempo que se muestra convencido de que los rojiblancos alcanzarán la permanencia. "Es un equipo con muchísima intensidad, en un estadio maravilloso. Será un partido difícil en el que deberemos contrarrestar su intensidad", subraya.

Otro de los nexos que unen a Sporting y Barcelona es la presencia de Alen Halilovic en el club gijonés, debida también a la amistad de los entrenadores. Luis Enrique se mostró satisfecho del rendimiento del croata porque "está teniendo los minutos que buscábamos en un jugador tan joven. Tiene cosas a mejorar, pero en la mayoría de partidos ha tenido minutos. Seguro que mañana podrá jugar. Está en evolución".

Con tanta referencia a su pasado, Luis Enrique casi se vio en la obligación de puntualizar que "soy entrenador del Barça y lo primero que quiero es que gane mi equipo".

El Barcelona acude a El Molinón con el objetivo de distanciarse de sus perseguidores. Una victoria azulgrana abriría una brecha de seis puntos con el Atlético y de siete con el Real Madrid. Luis Enrique admite que sería "un magnífico resultado", pero matiza que no resultaría "definitivo" para la Liga. "Por fin recuperamos la jornada que habíamos perdido en el Mundial de Clubes. Nos da la oportunidad de separarnos de nuestros rivales directos y significa muchísimo en la clasificación", señala.

Desde la óptica azulgrana, la visita a El Molinón se entiende como la oportunidad de marcar distancias con sus perseguidores. Para el Sporting es una oportunidad de alejarse un poco más de las plazas de descenso y de recibir un respaldo moral de consideración. No abundan las historias como la de Abelardo y Luis Enrique dos amigos que han tocado el cielo como futbolistas y que ahora cumplen sus sueños como entrenadores. Luis Enrique vuelve a casa rodeado de estrellas.