Cuéllar alza la voz para hacer reaccionar al Sporting y al sportinguismo. El emeritense dio ayer un golpe sobre la mesa como muestra del liderazgo que demanda la situación en la que se encuentra el equipo, distanciado a tres puntos de la permanencia a falta de nueve jornadas. "Parece que sólo hay aires de pesimismo. No le veo ningún sentido a ir por la calle cabizbajo. Si se da que este equipo no se salva, hay que dar por sentado que lo vamos a dar todo para poder mirarnos a la cara a final de temporada", afirma. El rojiblanco va más allá. "Este ambiente te merma y te hace dudar de tu capacidad. Si alguien quiere tirarse del barco, que se tire, yo no lo voy a hacer; no dudo de este equipo", subraya.

"Sabíamos que se podía dar esta situación y, lo normal, es que se diera", adelanta Cuéllar, con el objetivo de minimizar la tensión por la delicada situación en la tabla. El emeritense se va calentando, especialmente cuando sale el tema de los errores arbitrales. "Si ya tenemos dificultades, obstáculos desde un principio y desigualdades...", apunta. "Eso de que se trabaja para que haya una igualdad entre pequeños y grandes", prosigue hasta dar muestra de su hartazgo por situaciones como la clara mano de Fornals en Málaga. "Cuando uno comete errores hay que castigarlos. Cuando yo los cometo, en el 99% de los casos el balón va para adentro, y el castigo lo tengo. Por lo tanto, los demás tienen que aguantar lo suyo y no limpiarse las manos. Cada uno tiene su responsabilidad y hay que acatarlo. No quiere que me regalen, pero que tampoco me quiten", subraya.

El guardameta rojiblanco tiene claro que el Sporting no debe de perder en batallas contra los árbitros, ni tampoco achacar todos sus males a esto. "No nos tiene que mermar psicológicamente. No nos podemos sujetar a eso, aunque en las últimas dos salidas nos han perjudicado", explica. Y es por este motivo por el que busca que sus compañeros y también el entorno del club, no decaigan en la confianza de alcanzar la permanencia. "El factor psicológico puede mermar, pero esta plantilla tiene mucho potencial. Estamos luchando. Es como si fuéramos William Wallace ( en referencia al protagonista de la épica película Braveheart), muy poquitos contra muchos. Nos lo merecemos, y somos capaces de conseguirlo. Estoy seguro de ello", asegura sobre la salvación.

La primera piedra de toque estará este sábado en El Molinón, con la visita del Atlético de Madrid. Un club en el que se formó y conoce a la perfección Cuéllar. "Es el que le está siguiendo los pasos al Barcelona, ya dice mucho. Es el menos goleado y un equipo muy seguro. Sabe el juego que tiene que hacer, el antijuego. Saca de sus casillas al rival, intenta que no esté cómodo, no tenga un despliegue de juego y sea interrumpido constantemente. Hace los partidos atascados y les va muy bien", dice de los colchoneros. El rojiblanco toma como referencia el partido de la primera vuelta, en el que el Sporting cedió la derrota en el descuento, como un modelo a seguir. "Vamos a tener que hacer lo mismo no, tenemos que ser mejores. Ojalá que el partido sea parecido en cuanto a trabajo y aguante, y que cambie el marcador, en positivo .Todo lo que sea sumar será positivo", sentencia.

Cuéllar echa mano de otras experiencias vividas en el Sporting para mostrar que existe motivos para creer en el equipo. "Es evidente que la recuperar la confianza se consigue con actos positivos. Mostrando, por ejemplo que lo que vivimos hoy en día es gracias a un pasado reciente y somos los mismos. No nos despeguemos de ello", destaca. También recuerda anteriores permanencias alcanzadas cuando todo parecía en contra para conseguirlo. "Ahora estamos a un solo partido de salir del descenso. Recuerdo que estuvimos en situaciones de quedar seis partidos y tener que ganar cinco. Lo hicimos en su día, por tanto...", concluye el extremeño.