"¿Qué queréis que os diga, que quiero que baje el Sporting? Pues no lo voy a decir, aunque no quita que mi equipo vaya a salir a ganar". Marcelino García Toral afrontará mañana con el Villarreal su partido más complicado. Se enfrentará desde el banquillo rival a su Sporting del alma, el equipo en el que estuvo quince años entre jugador y entrenador, y que llega a la última jornada en una situación límite: necesita un resultado mejor que el del Getafe para mantenerse. "Me da igual que se dude de nuestra profesionalidad. No es nuestro problema. Tengo la conciencia tranquila desde que tengo uso de razón y desde que adquirí la madurez soy responsable de mis actos y voy para la cama muy tranquilo", señala Marcelino.

El actual técnico del club castellonense jugó 74 partidos con la camiseta del Sporting entre las temporadas 1985-86 y la 1988-89. Como entrenador estuvo en el Sporting B antes de dar el salto al primer equipo, al que dirigió dos cursos, desde 2003 a 2005. Para la gran mayoría de los sportinguistas queda grabada la temporada 2003-2004 como las del "casi ascenso", en la que un cúmulo de despropósitos, en el que también influyeron las malas decisiones arbitrales, impidieron a un equipo que se ha proclamado campeón de invierno consumar el retorno a la máxima categoría.

En ese 2005 los caminos de ambos se separaron y Marcelino firmó una gran trayectoria en los banquillos con tres ascensos a Primera con el Recreativo, Zaragoza y Villarreal, y las clasificaciones europeas con el Racing de Santander y el Villarreal.

Pero en esos once años, desde que el técnico de Careñes dejó Mareo, los caminos de ambos se han cruzado en siete ocasiones con un balance más positivo para Marcelino, ya que su única derrota ante el Sporting se remonta a la penúltima jornada de la temporada 2010-2011, cuando los rojiblancos ganaron a su Racing por 2-1, un resultado que daba la permanencia matemática al Sporting.

De los siete partidos, tres acabaron en empate, curiosamente las tres primeras veces que los caminos de ambos se cruzaron, y tres en victoria para Marcelino, que coinciden con las tres últimas ocasiones que se han medido. Este curso, en la primera vuelta, el Villarreal ganó 2-0 al Sporting en El Madrigal, en un partido con polémica ya que el cuadro amarillo se adelantó en una jugada que comenzó en fuera de juego y luego al Sporting se le anuló un tanto a Bernardo tras un saque de banda de Luis Hernández al considerar el árbitro que el colombiano había hecho falta al portero del Villarreal.

Hace tres años, en Segunda, el Villarreal ganó 2-1 al Sporting en una temporada en la que Marcelino tomó las riendas del conjuntro amarillo con la campaña iniciada y les llevó al ascenso. Y hace cuatro temporadas, en el año del último descenso del Sporting a Segunda, el Sevilla de Marcelino ganó 2-1 a los rojiblancos en la octava jornada en el peor curso del de Careñes en los banquillos, ya que era despedido del club de Nervión antes de concluir la temporada.

En la campaña 2005-2006 Marcelino no fue capaz de ganar al Sporting en sus dos partidos con el Recreativo, y empataron en El Molinón a un tanto y sin goles en El Colombino. Y en la temporada 2009-2010, en el banquillo del Zaragoza, también se repitió ese empate a un gol. Por lo que Marcelino todavía no sabe lo que es ganar como rival en el campo del Sporting.

Con respecto al partido de mañana, Marcelino reconoce que es "un partido puñetero" para él, pero no deja de afirmar en ningún momento que su equipo hará todo lo posible por ganar. Sobre el equipo que alineará en Gijón, el técnico del Villarreal asegura que "será más o menos el mismo que el día del partido contra el Deportivo", y confirma por tanto que seguirá con las rotaciones con respecto al equipo habitual que ha disputado el grueso de los minutos de la temporada.

Lo que sí deja claro el técnico asturiano es que no habrá jugadores del Villarreal B en la convocatoria, ya que su filial se juega el liderato en su grupo de Segunda B. "Si el filial no se jugara nada pondríamos más jugadores del B, pero no disponemos de esos futbolistas por lo que la alineación será similar a la del pasado domingo", insistió.