El Sporting se plantea ejecutar en un plazo de dos años la opción de recompra de la Escuela de Fútbol de Mareo, en una operación que calculan que costaría entre 12 y 14 millones de euros. Sin embargo el club amenaza con construir una nueva ciudad deportiva si el Ayuntamiento no mejora las condiciones para recuperar las instalaciones. Si éstas no fuesen favorables y no se tienen en cuenta un descuento en el precio total por las inversiones que ya haya realizado el Sporting en Mareo, como por ejemplo la construcción de dos campos nuevos de hierba sintética que se realizarán este verano, el conjunto rojiblanco se plantearía construir incluso una nueva ciudad deportiva propia.

El vicepresidente rojiblanco y máximo accionista, en un encuentro con los medios de comunicación en Mareo, para explicar la situación económica y deportiva del club, mostró su preocupación por el patrimonio neto negativo del Sporting y que están en conversaciones con el gobierno municipal de Foro para activar la vía de la ampliación del convenio de uso de El Molinón. Ese nuevo convenio sería clave para eliminar antes de tres años el patrimonio neto, que en estos momentos impide cumplir al Sporting el "fair play" financiero y le negaría la oportunidad de jugar competición europea.

Otro de los aspectos que desveló ayer Javier Fernández es que el Sporting podrá destinar un 80% más que la temporada pasada para el gasto de las fichas del primer equipo. Un incremento que se produce debido a que el equipo ya no estará sometido a las importantes restricciones por parte de la Liga, debido a sus incumplimientos económicos, ya que el tope salarial se incrementará hasta una cifra cercana a los 20,8 millones de euros, cuando en la campaña que acaba de concluir se situaba en torno a los 14. En esa partida se incluye tanto las fichas del primer equipo, como el cuerpo técnico y el filial, así como primas variables fijas como las que se puedan pagar por goles a un jugador, en el caso de la temporada pasada la prima por la permanencia, y también otros aspectos como pagos a la seguridad social, el coste de cesiones o las amortizaciones de traspasos. Aunque el crecimiento del tope salarial es el de 40%, el club podrá destinar hasta un 80% más para la primera plantilla debida a que el resto de los pagos no crecen en la misma proporción.

El vicepresidente aprovechó la oportunidad también para dejar claras las cifras por los derechos televisivos. La campaña pasada los ingresos netos fueron de 28 millones, una vez descontados pagos como los 750.000 que corresponden a un plazo por la devolución del fondo por la ayuda al descenso de 2012 (que desde ahora esa devolución ya no tienen que realizarla los clubes que bajen a Segunda), un pago de 1,2 millones por gastos asociados a pertenecer al G-30 y la cancelación del contrato con la operadora Mediapro.

Para el próximo año el Sporting espera percibir unos 38 millones de euros en concepto de ingresos de televisión, aunque podrían llegar también a los 40 en función de otras variables. El escenario más favorable para el Sporting sería que ascendiesen Nástic o Girona, ya que Osasuna y Córdoba, al haber participado en los últimos cinco años en Primera, podrían situarse por encima en el 25% del reparto televisivo que va de acuerdo a la clasificación del último lustro. Las otras variables del reparto televisivo son un 50% de manera equitativa, y un último 25% por la implantación social, que se divide en dos tercios por la audiencia televisiva de cada club (el Sporting fue el decimocuarto la última campaña) y un tercio por ingresos de abonados, taquillas y venta de Palcos VIP.

El máximo accionista del club también dio explicaciones acerca del pago de deuda. Según informó, el club ha abonado 29 millones de euros a Hacienda, 14 millones de deuda corriente y 15 millones de deuda aplazada. El consejo de administración espera que a enero de 2018 la deuda total del club quede reducida a 4,1 millones, una vez que se salde la concursal subordinada con Hacienda por importe de 7 millones de euros. Esos 4,1 millones de euros se repartirían en 1,5 millones de deuda concursal ordinaria, 900.000 de las marcas a devolver al Ayuntamiento, 200.000 a Liberbank y 1,5 millones de la devolución del fondo de ayuda al descenso.

En cuanto a la vinculación con Doyen Group, el Sporting abonará en tres plazos la cantidad pendiente que debe al fondo de inversión, que se sitúa en 2,8 millones, antes de que acabe el año. Los tres pagos serán de 500.000 euros y 900.000 euros este verano, y el último, de 1,4 millones, se llevará a cabo en diciembre.