El delantero croata del Sporting llegó, besó el escudo y se bautizó con una ovación de El Templo después de intentar con sudor, tesón y ganas el gol.

El tanto del delantero centro del Sporting no se anotó hasta el minuto 50 -sólo tres minutos después llegaría el segundo para los sportinguistas a través de las botas de Víctor Rodríguez-. El gol llegó gracias a un disparo de bolea que había practicado -y anotado- en los entrenamientos a lo largo de la semana.

"Estoy demasiado cansado como para pensar en español", revela entre risas Duje Cop. Después de disputar 83 minutos, a la máxima intensidad y con varias oportunidades de seguir aumentando la cuenta personal de goles siendo sólo la primera jornada, es lógico que el croata cayera fulminado una vez que se hizo el cambio -entró por él Carlos Castro-.

"Estoy realmente contento por el equipo, más que por el gol, porque todo el equipo ha jugado muy bien. Es un partido para disfrutar", confiesa sonrojado el delantero.

Asimismo reconoce que para él resulta "muy especial" jugar en El Molinón en competición liguera, aunque ya debutó en el Trofeo Villa de Gijón.

Después de anotar un gol que puso en pie a los más de 25.000 espectadores que se repartían por las gradas de El Molinón, Duje Cop sabe que su trabajo es hacer goles, pero dice que "no quiero obsesionarme con el gol, sólo quiero jugar bien y que las cosas sigan así a lo largo de la temporada".

El delantero dejó con buen sabor de boca a La Mareona, que ya se frota las manos pensando en las alegrías en forma de goles que el croata puede dar esta temporada. De momento, la segunda jornada de Liga tiene parada en Mendizorroza. No será un partido fácil, pero Cop ya tiene puesto el ojo en el balón y con el recuerdo de este primer tanto con la zamarra sportinguista marchará a tierras vascas en busca de aumentar la lista de goles.