"Queríamos volver a ser un equipo organizado defensivamente y lo conseguimos. Hemos hecho un gran esfuerzo. El resultado me parece un poco injusto". Sergio Álvarez lamenta que el Sporting se quedara con la miel en los labios con ese penalti a última hora. El centrocampista rojiblanco considera que los gijoneses debieron llevarse algún botín de Balaídos tras lo visto durante los noventa minutos. "Hemos hecho un gran trabajo a nivel defensivo y hemos merecido llevarnos un punto", subraya el avilesino, que contó con Xavi Torres como pareja, de inicio, en la medular del Sporting.

"El partido ante el Atlético nos hizo daño", reconoce Sergio sobre las consecuencias de la goleada recibida en el Calderón. El jugador del Sporting señala que, durante la semana, el vestuario se conjuró para volver a ser serio en labores defensivas e intentar desespera a un Celta que llegaba tras sumar solo un punto tras cuatro jornadas disputadas. "El Celta nos hizo muy pocas ocasiones", recalca para dejar claro que los gallegos no plasmaron su dominio con acciones de peligro, más allá de que los gijoneses sólo tiraron entre los tres palos en el penalti convertido por Cop.

El vestuario se marchó un tanto enfadado con la actuación del árbitro, ya que consideran que Amorebieta tocó antes el balón en la caída de Radoja en el área. "Volveré a ver las imágenes, pero en directo no me pareció penalti", concluye Sergio.