Sergio Busquets se puso al frente de la máquina de pases del Barcelona en el primer tiempo y Sergio Álvarez tomó el relevo en la crecida del Sporting tras el descanso. Los dos centrocampistas confirmaron su importancia en el funcionamiento de sus equipos. Para buscar las razones del desequilibrio en el marcador hay que mirar hacia otro lado. Con 0-2, Luis Enrique consideró que era el momento de dar descanso a Busquets, quizá porque es el único que puede ejercer de pivote con ese rendimiento.
Sin sus dos acompañantes habituales, Rakitic e Iniesta, Busquets tomó el mando de las operaciones en cuanto Del Cerro Grande hizo sonar el silbato. Ante el empuje inicial del Sporting retrasó su posición para incrustarse entre los dos centrales y dar salida al balón. Por eso fue el jugador del Barça que más pases dio en el primer tiempo, 34, de los que 33 llegaron correctamente a su destino. La mayoría los ejecutó en corto, como transición para conectar con los laterales o con los tres medios que ayer le auxiliaron: Rafinha, André Gomes y Arda Turan.
El protagonismo de Busquets derivó en el ostracismo de Sergio. El "6" del Sporting se pasó el primer tiempo intentando contener los ataques del Barcelona y apenas pasó del centro del campo. Sólo intentó nueve pases, de los que completó siete, y ni siquiera brilló en el capítulo de la recuperación de balones porque se quedó en tres. Curiosamente, ni siquiera recurrió a las faltas, ya que el árbitro sólo le pitó una. En ese apartado Busquets se quedó en blanco en los 67 minutos que estuvo en el campo, entre otras cosas porque el árbitro no sancionó una mano que cortó un pase de Lillo muy cerca del banquillo barcelonista.
Hubo vuelco en las estadísticas a la vuelta de los vestuarios. El Sporting dio un paso adelante y, como suele ser habitual, Sergio Álvarez se puso al frente de la carga. Ya antes de que Busquets se marchara a descansar, el protagonismo había pasado a las botas de Sergio, que brilló en un segundo tiempo con 17 pases completados de 19 intentos. Mientras, en los 22 minutos que estuvo en el campo, Busquets adornó sus números con 7 de 7, para un total de 41 y 40.
El desplome final del Sporting se entiende tanto por la inferioridad numérica como por el bajón físico de jugadores como Sergio Álvarez, que notó la labor de desgaste que había realizado, sobre todo en el primer tiempo, cuando tuvo que centrarse en la recuperación del balón. Después, cuando el partido se abrió, Sergio fue uno de los rojiblancos que cubrió más campo, aunque no llegó a posiciones de remate. Tanta actividad también se reflejó en la estadística sobre la distancia recorrida, con Sergio como líder destacado con 12,6 kilómetros, seguido por su compañero en el doble pivote, Sergio Cases, con 12,1.
Este dato refleja la principal diferencia entre los dos Sergios. Mientras que Busquets marca el estilo del Barça, definido por el juego de posición, Álvarez es el ideal del tipo de centrocampista para el Sporting, de gran despliegue físico para cubrir una amplia parcela del campo. Busquets no aparece entre los cinco jugadores del Barcelona con más distancia recorrida, capítulo encabezado por André Gomes, con 12 kilómetros, seguido por Rafinha (11,4), Sergi Roberto (11,3), Arda Turan (11) y Digne (10,7).
