El economista y auditor de cuentas José Miguel Guzmán Rendueles falleció en la mañana de ayer en Valencia, de manera repentina, después de haberse sometido, en el día anterior, a una cirugía menor. Socio director de la empresa EB Consulting, firma vinculada al estudio de las cuentas del Sporting durante los últimos años, estaba casado con Covadonga Gutiérrez Merino, médico analista, con la que tuvo tres hijas: Inés, Cristina y Paula. El funeral de cuerpo presente por su eterno descanso se celebra hoy, en la iglesia parroquial de San Julián de Somió, a partir de las 18.00 horas. A continuación, sus restos mortales serán incinerados. La noticia de su muerte ha supuesto un gran impacto tanto en el sector empresarial asturiano, donde era una figura reconocida, como en el propio club rojiblanco.

Ligado a EB Consulting, despacho fundado en 1985 dedicado al asesoramiento de empresas, así como a EB Auditores, José Miguel Guzmán Rendueles, Chechu, como era conocido en su círculo cercano, también estaba ligado profesionalmente a varias sociedades mercantiles del Grupo Masaveu, en las que ejercía como consejero. Su pérdida ha causado un gran estupor por aquellos que han trabajado junto a él durante su intensa actividad en el sector empresarial, así como por aquellos amigos que conocían el viaje que había emprendido a Valencia. Lo que comenzó como una intervención quirúrgica menor terminó con un fatal desenlace que ha dejado rotos a amigos y familiares.

El Sporting conoció la noticia de su fallecimiento a primera hora de la tarde. Chechu Guzmán era uno de los hombres con los que la entidad mantenía un contacto relativamente frecuente, al margen de que EB Auditores se encargara del estudio de las cuentas del club durante los últimos años. Varios miembros de esta empresa también colaboran habitualmente con el club en labores vinculadas a mantenerse informados de detalles contables previos el examen del ejercicio.