Jeremie Boga, atacante de 19 años cedido por el Chelsea al Granada, era una de las prioridades que manejaba Nico Rodríguez y el Sporting para reforzar la plantilla rojiblanca con vistas a esta temporada. Tanto insistió el Sporting que, a primeros de julio, Boga, junto a su hermano, su padre y su agente, aterrizaron en el Aeropuerto de Asturias. Allí los esperaba Nico Rodríguez que les hizo una visita guiada por la ciudad. El futbolista conoció Mareo y fue llevado a El Molinón, donde tuvo la oportunidad de saludar y mantener un breve encuentro con el propio Abelardo. Fue una estancia breve porque al vuelo de vuelta partía a primera hora de la tarde. El marfileño tuvo una excentricidad: preguntó si había alguna sala de billares. Boga parecía en aquel momento encantado con Gijón, pero finalmente Paco Jémez, que ya lo había querido un año antes, se lo llevó a Granada.