No fue necesario hacer noche al raso, ni tampoco pegarse un buen madrugón para asegurarse una entrada para el partido de este sábado en el Bernabéu. El amplio envío realizado por el Madrid, que ha mandado a Gijón 1.271 localidades para el duelo ante el Sporting, junto al efecto de la mala racha del conjunto de Abelardo, provocó que ayer no se vieran las grandes colas de anteriores ocasiones en la apertura de taquillas. En este caso, para adquirir las 562 entradas que se han reservado a los abonados. Humberto González, padre e hijo, vecinos de Noreña, fueron los que encabezaron la espera, desde "las 6.30 de la mañana, más o menos", entre la veintena de aficionados que aguardaban su turno para acompañar al equipo en su visita al líder. El club cerró la jornada con apenas un centenar de ventas que hace que se replantee ofrecerlas, a lo largo del día hoy, al público en general, evitando condición de acudir con un carné del Sporting para tener derecho, como máximo, a dos localidades, todas ellas, con carácter nominativo.

"Había que venir pronto, por si acaso. Lo cierto es que esperábamos ver a más gente", confiesa Humberto González, padre. "Igual ganamos, como el año del gol de De las Cuevas. Uno no se puede perder este tipo de partidos", añade su hijo, que tiene la esperanza de repetir aquella última victoria en el territorio blanco, hace cinco años. Ambos comparten cierto pesimismo sobre la situación del equipo: "Hay que ganar partidos ya". Lo hacen sin dejar de mostrar su confianza en que, a pesar de esta mala dinámica, se logrará la permanencia. "Si se consiguió la temporada pasada con menos nombres, se logrará también en esta campaña".

Iván Rodríguez es otro de los que han acudido a las taquilla acompañado de su padre, Manuel. "Vengo por sacar unas entradas para unos amigos de él, pero yo no voy al Bernabéu, simplemente, porque no se lo merecen", dice el cabeza de familia. "Vamos a cerrar la granja, porque aquí no hay huevos", apostilla, evidenciando su enfado por la imagen del equipo ante la Real Sociedad. "La cosa está fastidiada este año", añade Iván.

"Se puede dar la sorpresa, ¿por qué no?", responden Miguel Ruiz y Aida Santos, dos jóvenes gijoneses, abonados al Sporting, que aprovecharán la visita del Sporting al Bernabéu para cumplir con más compromisos en la capital de España. "Mi novia está estudiando allí, voy a verla y aprovecho para que podamos ir también al fútbol", apunta Ruiz. "En mi caso, estoy haciendo un Máster allí, así que no puedo dejar pasar la oportunidad", explica Santos. "El partido del otro día fue horrible, pero tenemos que confiar en que la situación se saque adelante y se logre la permanencia. Hay que seguir animando al equipo", concluyen, aunque son conscientes de lo complicado de romper la racha ante el líder. La Mareona espera refuerzos para hacerse sentir el sábado en el Bernabéu.