La primera impresión es buena, pero la prueba de fuego tendrá lugar esta mañana cuando los integrantes de la primera plantilla rojiblanca se suban a la báscula en ayunas. El ojo avizor de Gerardo Ruiz dictará sentencias y aplicará sanciones en función de un baremo que él mismo ha diseñado: "Si alguno se pasa, hay multa económica en función de los gramos. Empieza a contar a partir de un margen lógico de 300 gramos", explica Gerardo Ruiz. El preparador físico del Sporting confesó que ayer había realizado "un pesaje informal", porque el bueno quiere hacerlo en ayunas y se realizará esta mañana.

Por ahora, el responsable de la parcela física maneja una primera impresión que le hace creer que todos los futbolistas se han portado bien durante las vacaciones: "Yo creo que sí. Hay algún chaval que puede que supere el peso, pero será una cuestión meramente de gramos, que estaría dentro del límite". Como curiosidad, Gerardo Ruiz apunta que "hay gente que viene incluso con menos peso del recomendado para competir porque se dedicaron a correr".

Y es que no a todos los futbolistas rojiblancos se les puso la misma tarea para las vacaciones. "Parto de un trabajo igualitario, pero hay connotaciones personales. A unos les mando más gimnasio y a otros más carrera. En general les recomendé cuatro días de trabajo y tres de descanso después del partido de Éibar", detalla. Más en concreto, la planificación incluía una sesión regenerativa de capacidad aeróbica, con carrera larga a bajas pulsaciones; dos días de gimnasio y otro de potencia aeróbica. "Ahora haremos una pequeña pretemporada con cinco sesiones en tres días que se corresponden un microciclo de acumulación de trabajo en el que prima el volumen a la intensidad", concentra el preparador físico. La próxima semana, ya con partido de liga a la vista, seguirá "incrementando el trabajo con mayor dedicación a la intensidad".

Gerardo Ruiz también desveló que el Sporting no entrenará el día 1 de enero porque "sabemos que nos enfrentamos al mundo real". El preparador físico explica que "el alcohol es fatal porque deshidrata la musculatura y aumenta el riesgo de roturas", por eso y porque asume que "un chaval de veinte años va a beber algo el día de Nochevieja, no me gusta entrenar el día 1".

Al ser cuestionado sobre la cantidad de goles que recibe el equipo en los minutos finales de los partidos, en comparación con los arreones finales de la temporada anterior, Gerardo Ruiz hace una lectura positiva: "Influye también el carácter, la casta, ser aguerrido y sufridor". El preparador físico reconoce que "en los primeros partidos nos costó un poco más encarar el final de los partidos", pero matiza que "ahora las segundas partes están siendo mejores". Ruiz se muestra satisfecho con el trabajo físico que están realizando su equipo y plantea un símil que define su forma de enfocar la preparación física: "Queremos una meseta que se alargue lo más posible y que no sea un estado físico máximo, porque los pico dan paso a valles. Yo prefiero una meseta, un estado óptimo para competir" durante todo el año.

Por último, Gerardo Ruiz, una de las manos derechas de Abelardo, analizó el estado de ánimo en el que se encuentra el técnico rojiblanco. "Lo veo animado. Siempre que huno corta unos días, limpia la mente", señala antes de apuntar que "si nos coges cuando acabas de perder tienes una mala leche increíble y estás cabizbajo y sufriendo". La conclusión del preparador físico rojiblanco es que "al Pitu lo veo con ganas de trabajo y de superar esta lucha, pero yo soy una persona muy optimista que veo la botella siempre medio llena". Gerardo Ruiz no espera encontrar ningún jugador pasado de peso.