El Tribunal de Arbitraje del Deporte ha concedido, a instancias del Sporting, la suspensión cautelar de la sanción de cierre parcial de una grada de El Molinón. Este mismo organismo tiene que decidir ahora sobre el recurso presentado al Sporting y que afecta al fondo mismo de la cuestión, es decir, determinar si finalmente se tiene que cerrar una zona del municipal gijonés o no. El motivo son unos supuestos gritos racistas emitidos desde el fondo sur y dedicados al delantero del Athletic de Bilbao Iñaki Williams en la primera jornada de Liga. El árbitro de aquel encuentro Clos Gómez llegó a detener el choque y recogió estos sonidos en el acta. El Comité de Competición decretó el cierre parcial de El Molinón, sanción que debía cumplirse mañana. El Sporting recurrió a Apelación quien también le falló en contra y decidió agotar la vía deportiva en el TAD.

Paralelamente, solicitó la suspensión cautelar de la sanción hasta que se resuelva la sustancia del asunto. No se espera el fallo definitivo hasta dentro de dos o tres semanas. La sanción tampoco se hubiera podido cumplir mañana porque el Comité de Competición aún no ha concretado la zona del campo que se verá afectada, ya que el propio Clos Gómez no supo especificarla cuando fue requerido.

El Sporting está dispuesto a llegar a la justicia ordinaria si el TAD también le falla en contra y ya prepara un recurso por vía contencioso administrativa, donde nuevamente pedirá la suspensión cautelar de la sanción. El pulso está servido.