Sporting y Betis se reencontraron ayer tras regresar a Primera División de la mano, hace dos temporadas, en aquel inolvidable y sufrido desenlace para la Mareona, que no suele perdonar la oportunidad de volver al Benito Villamarín. Los actos de hermanamiento entre peñas se multiplicaron en la previa del encuentro. Fue el caso de los protagonizados por las sportinguistas Vegadeo y Mattuso-Sevares con la bética Pino Montano, en la que también estuvieron representantes de Aficiones Unidas. La gijonesa Los Gemelos se reunió con Barrio de la Feria y Nunca Caminarás Solo, propulsora del acercamiento entre asturianos y andaluces, mantuvo un encuentro con la de Bomberos de Sevilla. Todos se despidieron con la intención de reencontrarse en Gijón para el partido de la segunda vuelta.

Las aficiones de Sporting y Betis han vuelto a demostrar cómo el fútbol esta capaz de estrechar lazos y compartir sentimientos. La sintonía entre seguidores de uno y otro equipo se mantiene viva más allá de los momentos deportivos que marcaron la trayectoria de ambos clubes con resultados que contribuyeron a que el sportinguismo y el beticismo vayan a una.

La visita al Benito Villamarín también contó con una amplia presencia de miembros del club. Javier Fernández, presidente del Sporting, siguió el encuentro en directo en el estadio del Betis. Estuvo acompañado de Ramón de Santiago, secretario del consejo de administración, que ya se había desplazado a Sevilla a mitad de semana. La nómina se completó con Nico Rodríguez, director deportivo del Sporting, muy pendiente del estreno de Rubi.